martes, febrero 20, 2007

El enfermito

Hoy estamos a martes y queda cada vez menos para que dos acontecimientos importantes en mi vida tengan lugar:
- Tengo que afeitarme.
- Tengo que pelarme...

Estooooo, no sé en que estaría pensando...
Como digo, dos acontecimientos importantes:
- El viernes vuelo directo al carrusel de La Viña.
- El lunes que viene nos volvemos Macamen y yo para empezar a vivir juntos.

¡¡¡Vaya tela, ¿no pisha?!!! También queda menos para recibir el preciado cd del Yuyu que mi queridísima novia me ha comprado y mandado para acá, jejeje (eres la mejón). Me gustaría ver la cara del Yuyu si le dijeran que un cd suyo vuela hacia München, aunque lo mismo no es nada del otro jueves y todavía llega más lejos. Teniendo en cuenta la repercusión del carnaval hoy en día, es más que probable.

También queda menos para que mis cuñaos se encalomen en el piso y nos peguemos un finde de destroyer.

Y por quedar, ya queda menos para que se acabe Fasching aquí en München, que es como llaman al carnaval, y deje de cruzarme a gente disfrazada en el metro que me recuerdan más a mi carnaval...

Me gustaría haberme acercado y contaros como va eso del carnaval aquí en München, pero últimamente no paro de currar y salgo tarde, así que la juerga que desde la mañana ha tenido lugar en el centro de la ciudad la dejo para otro año. De todos modos es raro, martes de carnaval, sí, pero no es ni festivo ni nada aquí, no sé como se lo monta la gente para escaquearse del curro ahora que estamos a principios de Febrero. Porque eso sí, no había ni el tato hoy en BMW. Hombre, tanto como ni el tato no, pero sí que estaba la cosa tranquila. He tenido hasta que cancelar la reunión semanal de los martes porque iba a ir yo, yo mismo e Irene (es por lo de la peli, no conozco a ninguna Irene, que no cari, que te juro que noooo...).

Al salir del curro me he encalomado en casa del "vecino". El "vecino", como nos llamamos mutuamente, es Jordi, por supuesto, que cuenta con un pequeño handicap la criaturita, y es que se ha escogorciado el hombro este fin de semana (no cuento como que mi madre es muy aprensiva... jejeje) y está inmovilizado y puteado. La jodienda no es solo esa, es que encima es el hombro derecho y es diestro, así que anda el pobre medio jorobado que no puede hacerse nada. Por ello me he autodenominado cocinera de las cenas (sí, cocineraaaaa, que tiene más morbo, jejeje), y desde ayer y mientras no pueda valerse por si mismo, estoy encantado de echarle un cable y cocinar algo para los dos. Y no entraré en detalles porque este no es el blog del Arguiñano. Cena y charla de amigos después del curro siempre se agradece un montón, sobre todo hoy que me he tirado toda la tarde más solo que el que lo inventó.
Mañana aprovecharemos el deco y veremos el partido del Barça en su casa, aunque espero no llegar muy tarde.

Contando días para el viernes... uno... dos... tres!!!

2 comentarios:

Anónimo dijo...

JEJEJE,PEDRITO,YA TE ESTAMOS ESPERANDO AQUI EN CADIZ PARA CANTAR HASTA JARTARNOS EN LA VIÑA.AQUI AHORA MISMO LLUEVE PERO SEGUN DICEN MAÑANA NA DE NA,ASI QUE DATE PRISA Y TIRA YA P´ACÁ.

Anónimo dijo...

No das señales de vida. Como se nota que tienes compañía.

Un abrazo y cuidarse....

José A.