domingo, diciembre 17, 2006

Semana en Blanco

No, no es que esté nevando a saco, que va a ser que no, aunque esta mañana está cayendo algo de aguanieve y las previsiones dicen que veré algo de nieve antes de volar rumbo a casa este próximo viernes, me refiero a la semana que llevo sin escribir este blog. Es lo que tiene cuando se te cuelga dos veces el ordenador mientras estabas escribiendo y te coges un mosqueo del quince.
Es lo que tiene la informática, me da de comer, pero a veces es para cagarse en sus...
Pero bueno, no es que pueda decir que no he hecho nada esta semana. En general ha estado bastante completita (en cualquier otra cosa que no sea trabajar, que de eso estoy hasta arriba).
El mártes estuve con los de la oficina cenando en un libanés. Mi compi de oficina, Haytham, es libanés, y lleva tiempo detrás de nosotros para invitarnos a comer en un restaurante libanés que conoce cerca de Munchner Freiheit. La comida es una pasada. No hay nada mejor que ir a comer a un restaurante foraneo con un autóctono. No hablaré del hummus, o de los falafels... en fin, que me entra hambre solo de pensarlo. Buenísimo. Me acordé mucho de Miguelín, quien hubiese disfrutado como un enano, jejeje.
El miércoles toco cita de nuevo con el dentista. Lo que he sacado en claro de mi visita con el dentista desde que estoy aquí en München es:
- El sistema sanitario alemán tampoco es la panacea. Es decir, la asistencia es buena, pero joder, es que la pagamos. Solo de Krankenkasse (seguro médico) estoy soltando unos 250 euros yo y otros tantos Carlos (la empresa paga siempre la mitad). Así que eso de que no te cobren en el dentista está bien (bueno, te cobran 10 euros cada 3 meses, una pequeña tasa que pusieron no hace mucho y que causó mucho revuelo aquí), pero tampoco es sorprendente, ya te lo están cobrando por otro lado, carajo.
- Como no me cobra el dentista, no puedo sospechar del mismo porque quiera hacerme lo que quiera (en la boca, está claro, ¿no?), así como tampoco repara en gastos y te hace las radiografías que necesita y todo eso.
- Mi anterior dentista no tenía ni puñetera idea (lo siento mamá, pero es así), y este sí que sabe lo que se hace. Además, como que le hace ilusión al tío ponerme la boca en su sitio.
- Pienso aprovecharme del sistema sanitario todo lo que pueda. Haré como los cabrones de los ingleses que hacen turismo sanitario en España y van a operarse por la patilla en sus vacaciones.

El viernes hicimos cena en casa de despedida. Despedida de Eduardo y Vevi, que se vuelven para España a buscar curro allí. Pasamos un buen rato charlando y tomando buen vino (cada vez me gusta más, es lo que tiene juntarme con estos sibaritas, jejeje).

El fin de semana se puede resumir en dos cosas:
- Oficina. No, no me refiero a trabajar en lo mío, sino en la afición por Bricomanía que estamos desarrollando currando en la oficina de Carlos. La verdad es que es sorprendente lo que hemos hecho entre todos allí. Cambiado enchufes, arreglado paredes, pintado y por último poniendo un suelo laminado. El laminado es una especie de parquet que Carlos ha comprado en el IKEA y que estamos poniendo como auténticos profesionales. Hay que destacar que no es tarea sencilla ni mucho menos, pues cuando llegas a las esquinas, a las puertas y en las paredes, hay que ajustar y cortar las láminas para que todo cuadre. Pero a pesar de los errores iniciales que hemos ido subsanando, hemos de decir que somos unos auténticos profis ya, así que si lo de la ingeniería no funciona bien, siempre podemos dedicarnos a la albañilería, jejeje. Lo último es poner los rodapiés en su sitio, que debido a la increible consistencia que estamos encontrando en la pared, poner los espiches para el soporte del rodapié nos está haciendo sudar sangre. Pero todo se andará.
- Restaurante medieval. Una pasada (de comer, de beber y de pagar, jeje). Carlos había reservado mesa para nosotros la noche del sábado para comer en un restaurante rollo medieval. Es muy divertido, pues te hacen todo el show, y tienes que comer con las manos (lo de comer con las manos se está repitiendo peligrosamente en mi vida), sin tenedor, tan solo un estilete y una madera a modo de plato. Hay un juglar tocando y cantando, las mujeres tienen que servir a los hombres (esto es lo más divertido), y la comida es muy medieval. Todos los días hay un plato fuerte y es el que te toca comer. En la puerta hay una lista que pone lo que tendrán cada día en unos pocos de meses. Nosotros queríamos comer cochinillo, pero nos toco ganso, que tampoco estaba mal, la verdad. Tengo algunas fotos, pero estoy recargando las pilas para poder descargarlas. Cuando las tenga las cuelgo. Toda la comida estuvo, obviamente, regada con abundante cerveza oscura típica, que estaba buenísima, pero que hizo subir la cuenta con más fuerza que la espuma de la misma, jeje.

Hoy domingo está uno muerto a estas horas, deseando que pasen los días lo más rápido posible y que llegue el viernes para volar de vuelta a casa. ¡Me sobran ganas!

domingo, diciembre 10, 2006

Australia

El viernes no podíamos romper con nuestra dinámica de salir por ahí a cenar, y teniendo en cuenta que estaban aquí Cristina y Jesús, quise llevarmelos a algún sitio exótico. Así que con la ayuda inestimable de Lluís, reservamos en el Etíope y me los llevé a comer con los dedos como ya os he contado en anteriores ocasiones. Ni que decir tiene que les encantó y como muestra os pongo la foto con la cara de felicidad y cochinos que se nos puso a todos. Además y como curiosidad, tomamos un vino sudafricano que estaba bien bueno...

En el etiope después de pringarnos las manos

El sábado aprovechamos para pegarnos un viajecito los tres. Fuimos a Salzburgo, en Austria, la ciudad de Mozart. Y digo bien, la ciudad de Mozart porque si el susodicho interfecto levantara la cabeza le daría un soponcio de ver la que hay montada en su ciudad natal. Hay Mozart por todos lados. Aunque también se entiende, este año conmemoraban el 250 aniversario de su nacimiento. De todos modos, la ciudad es impresionante, preciosa, y esta época es sin duda, la mejor para visitarla, todo lleno de mercadillos y de adornos navideños.
La única pega es la mojá continua que recibimos desde que pisamos Salzburgo. El viaje en tren desde München está muy bien, dura como una hora y tres cuartos y por solo 27 euros, pueden viajar hasta 5 personas ida y vuelta. Con estas condiciones quién no se anima... Aunque durante el camino vimos la nieve y paisajes nevados, al llegar a Salzburgo, el calor propio de la ciudad hacía que en vez de nevar, no parase de llover. Y no nos dió tregua alguna.
Para combatir el frio, nos comimos unas salchichas (vaya atracón de salchichas que se ha pegado mi cuñado esta semana) al curry que picaban "pa to sus castas", regadas con su correspondiente Glühwein.

Comiendo salchichas (joder como picaban) en Salzburgo

Viendo la ciudad encontramos una tienda donde vendían huevos pintados para adornar el árbol de navidad. Impresionante, miles de huevos pintados con todo tipo de motivos, y unos precios que quitaban el hipo. Había huevos por 15 y hasta 25 lerus. Aunque algunos eran verdaderas obras de arte, claro. Por lo visto son típicos en Salzburgo, porque había alguna otra tienda también que los vendía

Uno de los muchísimos montones de huevos pintados

Como no podía ser menos, nos hicimos una fotillo a la entrada de la casa natal de Mozart, que tiene un museo dentro pero que no pudimos ver por falta de tiempo. Tampoco es que sea nada del otro mundo. Una casa en el centro con un letrero grande en la fachada que dice "Mozart Geburtshaus" (casa natal de Mozart) pero siempre hace ilusión, claro.

A las puertas de la casa natal de Mozart

También vimos la catedral (impresionante) y a un grupillo cantando villancicos a la puerta de esta. Y probamos unos dulces que eran como bombas de relojería por lo que llenaban, regados por chocolate blanco caliente con un chorrito de Baileys para entrar en calor. Y es que el frío calaba por horas.
Un mercadillo de Navidad en Salzburgo junto a la casa de Mozart

Lo malo de que nos lloviera todo el día es que al cabo de las horas y de tanto pasear por la ciudad teníamos los pantalones chorreando y Jesús pisó sin querer un charco y se puso chorreando los zapatos. Ante semejante perspectiva nos vimos obligados a buscar por lo menos calcetines secos para que se los pusiera en el tren y evitara pillarse un trancazo de órdago. No solo encontramos calcetines, sino también unas babuchas de pelo que vendían en un puesto. Lo mejor era ver la cara de flipado del personal en el tren cuando empiezan a ver a Jesús quitarse los zapatos, los calcetines, plantarse los calcetines nuevos y luego las babuchas de pelo. Todo el vagón descojonado de risa, así como todos los que pasaban por allí y se daban cuenta. Pero como dice el refrán: ande yo caliente...

Las pintas de la criaturita en el tren

El resto del tiempo que pasaron estos dos en Münich se puede resumir en una acción, comiendo, jejeje. A la vuelta de Salzburgo fuimos a cenar a un italiano con Carlos y Anna y unos amigos de estos que han venido para esquiar (¡a ver si encuentran nieve!) y hoy domingo me los llevé a matarlos con un codillo en el Agustinerbrau. Ni que decir tiene que codillo y Apfelstruddle después se fueron al aeropuerto dando tumbos, pidiendo una cama para la siesta, pero con una sonrisa en los labios.
No hay nada como unas buenas vacaciones gastronómicas.

P.D: Lo de Australia tiene su explicación. Había en Salzburgo más italianos que austriacos, lo que explicaría una camiseta cachonda que vimos y que decía: "No kangaroos in Austria". Jejeje, estos pseudo deutsches...

viernes, diciembre 08, 2006

Cena en casa

Tollwood es un sitio al que no has de ir con una mujer. Es así de sencillo, es como los hippies que ponen en la Alameda (nota para los que no son de la isla: una pequeña plaza donde ponen puestos que venden tonteridas de esas de los hippies genial para cualquier regalillo), pero como a tamaño caballo. Enorme, lleno de puestos, con otros tres mil puestos de comidas de todas las nacionalidades. Que ocurre al final, que mi cuñao se quiere comer una salchicha en cada uno de los puestos y una cerveza, por no hablar del Glühwein, en los puestos restantes. Y que mi hermana se quiere comprar todas las chorradas que ve en cada puesto... Pero bueno se hace entretenido y se pueden comprar regalillos de navidad allí (ha caído ya alguno). El problema es que no se puede bajar muy cargado que luego el sobrepeso hay que pagarlo en el aeropuerto.

Luego cenita en casa. He cocinado unos champiñones a mi estilillo con vinagre de módena y un su embutidito y su salchichita. Comida medio española, medio bávara, pero comida al fin y al cabo.
Mañana creo que me los llevo al etíope por la noche para que flipen un poquillo con eso de comer con los dedos, jejeje.

miércoles, diciembre 06, 2006

La leonera

Así definiría mi madre en lo que se ha convertido mi habitación. Pero tiene su lógica, oye.
Hoy han llegado mi hermana Cristina y mi cuñado Jesús que han venido de vacances unos días a München. He ido a recogerlos al aeropuerto (más horas que debo al curro) y luego los he dejado en casa en manos de Vevi que se los ha llevado al centro mientras yo volvía a BMW a ganarme el pan. Pan que por cierto no he podido comer hoy, con el rollo de ir hasta el aeropuerto y con la reunión sindical anual en BMW, que cerraba hoy pronto la cantina, me he quedado sin comer.
Cuando he salido de trabajar, tarde, por aquello de recuperar el tiempo perdido, y he llamado a estos dos, el mamón de mi cuñao estaba ya medio pedo, pues le ha cogido el gustillo al Glühwein y se ha bebido no se cuantas... Mira que está rípio y cuesta metérselo entre pechoy y espalda, pero parece que le ha gustado y cuando han llegado a casa me he hartado de reir con la colección de tazas típicas de Glühwein que se había agenciado el tío. Si no fuera porque te las cobran en Pfand, diría que ya están los españolitos montando el mingo en el extranjero, jejeje. Pero oye, más vale que me calle, que yo me choricé también unas jarrillas de cervezas de las de a litro nada más llegar aquí.
Luego me los he llevado a cenar a un bávaro aquí cerca de casa y hemos estado charlando tranquilamente mientras cenabamos pato y cositas bávaras regado, por supuesto, con una weissbier.
Los he dejado sobando en el salón que están que se caen de sueño, y yo la verdad, no soy menos, así que con esto y un bizcocho...
... le cojo a tu hermana el chocho.

Queda basto, sí, pero es que no he podido remediarlo...

martes, diciembre 05, 2006

Actualización y mudanza

Como podréis ver, he podido actualizar el tema de las fotos y he subido unas poquillas al post anterior, así que no dejéis de verlas.
Solo como aviso, creo que después de Navidad estaré buscando piso para mudarme a vivir solito... sigh... que pena. No, fuera de coñas, tango Edu (que se vuelve a España) como Sergio (que se muda a otro piso) se me van del piso, así que creo que ha llegado el momento de dar el paso e irme a vivir solo (aunque espero que no por mucho tiempo, jejeje, ;-p).
Ya os contaré más.

domingo, diciembre 03, 2006

Tollwood

Esperpento extraño donde vendían salchichas y bocadillos en el mercado de figuritas de Belén

Bufff, de nuevo posteando, que parecía que ésto estaba más muerto que el blog de Juaniki, jejejeje.
Bueno, la semana ha pasado volando como podéis imaginaros sobre todo ahora que se ha ido mi querida novia. Partió el viernes (que dolor, que dolor, que pena) y llegó sin pegas.

Puestecillo de flores y adornos en Virktualenmarkt

Durante el resto de la semana, intentamos hacer cosillas juntos, pero lo mejor fue el jueves que me lo tomé libre. Ese mismo jueves abrían Tollwood. Tollwood es un mercadillo que montan donde ponen la Oktoberfest (Theresienwiese) y venden cosillas y todo eso. Como los puestos de los hippies, pero a lo bestia. La verdad es que está muy bien y puedes comer todo tipo de comida étnica y todo eso, aparte de los puestecillos. Montan unas carpas enormes y dentro están todos los puestos. Lo de las carpas es una idea genial, pues si llueve o nieva no es un impedimento para ir a Tollwood.
Pues estuvimos deambulando por la ciudad el jueves viendo Tollwood y el Weinachtmarkt (otro mercadillo) que montan en el centro, en Marienplatz. Además, nos comimos unos bocatillas típicorum alemanes y probamos el Glühwein en una tienda rollo raro que han montado junto a una pista de patinaje sobre hielo en Karlsplatz.

Comiendo bocatilla y bebiendo Glühwein

El Glühwein es una porquería que hacen aquí que está más dulce que comerse una dos colmenas a bocaos con abejas y todo, y que consiste en vino tinto caliente con miel y especias, al más puro estilo medieval. Al principio es un poco raro eso de beber vino caliente, pero cuando consigues que no te rayen los dientes la azucar, le coges el puntillo y no está mal. Es supertípico en navidad, y además, con el puñetero frío que hace, se agradece una barbaridad que esté calentito. Entras en calor en un santiamén. Se ve la gente recorriendo el mercadillo con las tacitas calientes de Glühwein, muy rollo ambiente navideño.

Macamen también le pegó al vinillo caliente...

El viernes acompañé a Macamen al aeropuerto y a la vuelta, como era tarde, me fui al centro otra vez para comprar el regalo de amigo invisible para el sábado (ahora lo cuento). El plan fue tranquilón, cena y películita (o serie de las mías, para ser más exacto) en casa.
El sábado estuvimos de Bricomanía. Estamos ayudando a Carlos que ha alquilado unas oficinas para abrir la oficina de la empresa y estamos adecentandola entre todos. Cuando digo Bricomanía, lo digo en serio, cambiando enchufes, pintando las paredes y techos y cambiando la moqueta en el suelo por un parqué laminado, como auténticos profis de la materia. Eso sí, más lentos que el caballo del malo, pero está quedando de arte. Ni que decir tiene que como decía la copla del Yuyu, en media hora estaba lista, me refiero a la cintura, claro, jejeje. El palizón es de envergadura y luego habíamos quedado, así que no puedo entender como conseguimos arrastrarnos hasta el local.

La pista de hielo en Karlsplatz

Todos los años, la colonia ingenieril española, que por hache o por be, nos conocemos un poco, hace una especie de cena o quedada de por navidad. En dicha fiesta, cada uno lleva un regalito en plan amigo invisible y luego se intercambian con el consiguiente cachondeo del personal y todo el rollo. La fiesta estuvo bastante bien, y se agradece salir en un ambiente donde entiendes la conversación de los que están al lado tuyo. El problema es que fue una de esas noches tontas, cuando no te apetece salir y terminas a las 6 de la madrugada en cualquier garito. Además, fuimos participes de un espectáculo increible en el que dos tipos se comían, literalmente, a una alemana. Resultó, para colmo de males, que uno de ellos era un mejicano de mi equipo de rugby, Fausto, que habeís visto en alguna foto de este blog, y un brasileño, Rogerinho, excompañero de piso de Vevi. Estaban intentando entre los dos camelarsela, y parecía que la alemana lo que quería realmente era un trío, pero más me he reído esta mañana cuando me he enterado por parte de Vevi que tanto interés de la alemana por el trío terminó en que se fue a casita sola, cuando los dos la dejaron por imposible, jejeje. Y es que, como dice el refrán, más vale pajaro en mano que ciento volando.
Hoy ha sido uno de esos días estúpidos que se pierden cuando hay que recuperarse de la juerga del día anterior, y me he tirado toda la tarde charlando con unos y con otros por el messenger, así que escaso tiempo he tenido ni para escribir este post. Tengo unas fotillos preparadas para subir, pero el blogger está cachondo y de momento no me permite subir fotos, así que cuando se arregle, las posteo para que las veáis.

Marienplatz de noche...

Un abrazo a todos, ya estoy de vuelta, jejeje.

domingo, noviembre 26, 2006

Comiendo raro

Lo más jodido de un fin de semana es, sin duda, la tarde del domingo. La terrible perspectiva de tener que currar al día siguiente. Pero siempre es un buen momento para repasar lo hecho durante el finde, o para repanchingarse en el sofá, que suele ser lo que ocurre la más de las veces, jejeje.
Creo, que una vez más, el finde se puede definir por la multiculturalidad (joe, parezco ZP) culinaria. No sé si es porque al estar en el quinto pino todo te parece extranjero en la cocina, pero la verdad es que aprovechamos los findes para comer fuera en sitios novedosos.
Todo empieza el viernes por la noche, en el Angolo de la pizza, segun estos, la mejor pizzeria de München. La verdad es que las pizzas están de lujo, y para los de la isla, comentar que me recuerdan mucho a las que ponían en Ettore los primeros años cuando estaban todavía cerca de la comisaría. Después de eso nos fuimos de marcha a Kultfabrik. Kultfabrik es una zona de marcha aquí en München, donde hay una buena retahíla de garitos. Entre todos estos, los españoles suelen ir al Cohibar, un garito rollo latino donde ponen música de la que estamos más acostumbrados. Sin embargo, fuimos a uno nuevo, el Bar Coyote. Sí, la idea es la misma que la de la película, las camareras se suelen subir a la barra y menearse en plan cachondas, jejeje. La verdad es que está bien, compras tu botella dentro, como ya comenté en otro post, y te haces el "pseudobotellón" dentro del garito mientras las chatis menean el palmito. Creo que he descubierto el garito perfect para Ceci, ¿o no?
El sábado estuve un rato en las nuevas oficinas de Carlos. Se ha alquilado unas oficinas cerca de casa para montar la oficina de la empresa, que de momento no teníamos. A las oficinas le hace falta un poco de mano de obra para adecentarla, así que entre todos le estamos echando un cable para ponerla guapa, aunque yo todavía no he podido ayudarle mucho, por aquello de que estando aquí Macamen tampoco me voy a encerrar a currar pasando de ella. De todos modos, ya nos pondremos manos a la obra el finde que viene.
Por la noche nos fuimos a un Indio en Leopoldstraße. A mí me gustó mucho, pero la comida era picante y Macamen, que no tolera ni oler la pimienta, pasó un mal ratillo, por desgracia. Creo que se le han quitado las ganas de volar a Calcuta, jejeje.
Ayer domingo nos fuimos de paseo los dos. La verdad es que nos dimos un pateo de cojones, tres horitas danzando por aquí y por allá (parque, centro, tiendas...) y al final terminamos comprando comida en un vietnamita muy bueno que hay cerca de casa. Al final, toda la comida oriental está supeditada al arroz, que panzada.
El tiempo sigue sin enfriarse, complicando el tema de ir a esquiar. Pasan los findes y al final veo que vamos a tener que ir al glacial con mi hermana y mi cuñao que vienen la semana que viene.
A ver que pasa...

miércoles, noviembre 22, 2006

¡¡¡¡Enhorabuena!!!!

Debo de estar más que exultante, los últimos post tienen los títulos llenos de exclamaciones, jejeje.
Bueno, la de hoy tiene una razón especial, nuestro querido compi José Manuel (también conocido en los ambientes isleños como er Jose, er Pérez, er Cabesa o como a mí me gusta llamarlo, er Manué) ¡¡ha pasado las pruebas físicas para la poli!! ¡¡Doscohoneahipisha!! Ya sabes lo mucho que nos alegramos todos por tí, pero además que quede constancia pública, jejeje.

¡ACHTUNG! El resto del post, es ligeramente escatológico, así que absténganse los remilgados como mi novia...

Tengo una sana costumbre que no comparto con los alemanes. Me lavo los dientes después de comer. Ya, ya sé que es exagerado. No quiero decir que los alemanes no se laven NUNCA los dientes. Semejante afirmación es amarillista, por supuesto, pero la verdad reside en que yo no he visto absolutamente a nadie lavarse los piños después de comer aquí en la oficina. Como sabéis, todos comemos aquí en el comedor de empresa y tras eso volvemos cada uno a su despacho a seguir con el curro. Al más puro estilo que más de uno conocemos (guiño, guiño, no doy nombres, jejeje) la única necesidad imperiosa que parecen presentar aquí los amigos deutsches justo después de comer, es la de plantar un buen pino.
Yo tampoco es que sea el paradigma de la pulcritud, ni mucho menos, pero la verdad es que si unimos los problemas dentales que vengo acarreando desde antes de pisar Alemania y el hecho de que todos los días como en el trabajo, me pareció una buena idea la de comprarme un cepillito y un tubo de pasta de dientes para asearme un poco loa boca después de comer.
Pues bien, ¡vaya putada! En serio. Imiginaos lo siguiente. Una interminable sucesión de cagones pasando por el baño y tu con unas ganas horribles de limpiarte los dientes. ¿A qué no te gusta la situación? Pues esa es mi pelea del día a día. Estoy pendiente, más o menos, a la peña que entra y sale del baño para buscar un huequito en el que el baño no huela cloaca (o como diría nuestro admirado Reguera, a "cañería pura"). Porque ¿a quién le hace gracia lavarse los dientes oliendo a mierda... de otro. Ok, rectifico, dije que este post sería un poquito escatológico, pero está quedando muuuuuy escatológico. Seguro que mi hermana se descojona cuando lo lea (caca, caca, caca, ¡Mon, no te rías!).
Me habían hablado mal de la tranquilidad pasmosa de los deutsches a la hora de entrar en el baño y dar rienda suelta a la naturaleza en presencia de otro. Que si les da igual apretar y que se note... tirarse un cuesquillo... y todos esos ruidos típicos a la hora de plantar. Yo soy culofino, como el de American Pie, si no es en mi casa me cuesta la misma vida, pero como en el curro se pasa uno unas 9 horas diarías, pues hay que acostumbrarse aunque espero que no haya nadie y si en el proceso entra alguien, pues me quedo quieto y callado hasta que sale... ano tímido que tiene uno, fíjate. Pues bien, hasta el momento no he podido constatar lo que dicen las malas lenguas de los alemanes (por suerte para mí) pero la verdad es que ayer se me cortó el cuerpo. Estaba yo tranquilamente lavandome los dientes cuando de repente entra alguien en el baño, veo por el espejo que me mira sorprendido, se mete en el cuartillo del water (una triste mampara a media altura, ni siquiera un cuarto de obra) y se baja rápidamente los pantalones (se oyó caer el cinturón al suelo)...

¡Arghhh!

El lavado de dientes más corto de mi vida. Lo juro.

martes, noviembre 21, 2006

Preparados... listos... ¡¡¡YA!!!

La verdad sea dicha no tengo de que quejarme.
Algunas cosas sueltas y una paranoia alemana.
¡Ya he firmado el contrato! Ya es oficial. Tengo curro en enero del año que viene en adelante. Jejeje, las cosas me están yendo mejor de lo que nunca pude imaginar.
Ayer nos fuimos Macamen y yo a dar un vueltazo al centro cuando llegué de trabajar. El único problema es que se hace tarde y hace frío, pero bueno, todavía no han bajado las temperaturas como para ponerse nerviosos, así que pudimos pasear y le regalé un gorrito de lana que vimos en el C&A. A la vuelta del centro, cenamos en un japonés. La verdad es que valiente numerito vernos a los dos peleándonos con los palillos para trincar los makis y el pescado... No sé como no nos salpicamos de salsa de soja con wasabi... A Macamen le gustó mucho y por fin pudo quitarse el antojo de probar un japonés. Creo que volveremos a repetir cualquier día de los que le quedan por aquí.
Hoy hemos ido a comprar algunas cosillas al LiDL, que estaban de semana española... Jajajaja. Pártete con la semana española. La semana española del LiDL son unas cuantas tortillas precocinadas, jamon "original" del muy malo, aceite envasado por dios sabe quien y algunas cosillas más. Lo mejor que hemos podido encontrar ha sido vinagre de Jerez, que ya veremos que tal sabe, y atención: ¡pipas y kikos! Genial, he pillado algunos paquetes para cuando veamos pelis en casa todos, que luego la semana española se acaba... la semana que viene, claro está.
Pero lo mejor es el tema de las cajas para pagar aquí en Alemania. Se convierte en una especie de maratón peligrosa en la que la cajera se dedica a tirarte las cosas mientras las pasa a toda velocidad por el detector de códigos de barras. Tú, a tu vez, tienes que correr más que ella poniendo las cosas en el carro, pero desengañate, ella se tira 8 horas diarias allí, tan solo pasando cosas por el lector y ha desarrollado una habilidad sobrenatural con la que no puedes competir. El tiempo se ralentiza para ella, como en modo Matrix. Tú ves sus manos volar recogiendo cosas de la cinta mientras te mira con cara de asquillo y las va soltando de mala gana tras marcarlas. Al final las cosas se te acumulan en el minimostrador de mala manera mientras haces lo que puedes sin conseguir llenar el carro. Y como vayas solo es todavía peor.
Todavía recuerdo con añoranza ese Hipersol a la entrada de Chiclana donde tenían un sistemita en la caja y la cajera, a la vez que iba marcando las compra, la iba metiendo en bolsas que salían arrastradas por una cinta y tan solo tenías que ponerlas cómodamente en tu carro. Mi padre se pasó años yendo al Hipersol de Chiclana solo por no tener que llenar las bolsas el mismo (pa que veáis que no soy el único flojo de la familia, jejeje).
Malditas cajeras del LiDL (aplíquese también a las del PLUS), tienen más prisa en echarte de allí que tú en dejar de verles la cara, porque esa es otra, ¿hacen un casting y cogen a las mas feas? No es ningún tipo de discriminación ni nada por el estilo, a mí me da absolutamente igual, pero me llama poderosamente la atención lo poco agraciadas o agraciados que suele ser el personal de un LiDL o de un PLUS... como en España, vamos... Porque ahora que lo recuerdo, dejé de ir a un Día que había en Sevilla cerca de mi casa porque el personal, aparte de feos, eran malajes de cojones.
Aunque teniendo en cuenta lo que cobran y lo que trabajan... también es comprensible.
En todos lados se cuecen habas...

domingo, noviembre 19, 2006

Otro que se acaba

La velocidad a la que finalizan los días los fines de semana es, evidentemente, inversamente proporcional al tiempo que tardan en pasar los días normales.
Sé que no acabo de descubrir la pólvora, pero es una verdad objetiva, subjetiva y porculera que no deja de fastidiar a cualquiera.
Macamen llegó "sin novedad" el viernes. Sin novedad incluye el cargamento de embutidos, picos, roscos, vinos y diversas viandas nacionales que tanto se echan de menos en tierras teutonas. Aquí tienen embutidos, sí, pero no tienen nada que ver con los nuestros. No es chauvinismo, es otra verdad, objetiva, subjetiva y culinariamente porculera, claro está. Ni que decir tiene la ilusión que le de a uno rellenar las estanterías con cualquier cosa que tenga sobreimpresionada la palabra "Iberico" en el papel, jejeje.
La noche del viernes la pasamos en casa de Jordi, quien se marcó una cenita de lujo que culminó a horas más bien tardías de la madrugada.
Acostarnos tan tarde puso fin a nuestras aspiraciones de salir de madrugada a ver el König See. El König See es un lágo a unas dos horas de München en plenos Álpes Bávaros cerca del "Nido del Águila". ¡El Nido del Águila! Una de los más importantes cuarteles y residencias de Hitler en todo lo alto de la montaña. Tengo que ir sin duda a verlo.
Pero como digo, no salimos a ningún lado y al final echamos el día en casa de Carlos y Anna dónde acabamos haciendo un "linner". Aquí es conocido el "branch" que viene significando "breakfast & lunch", algo así como desayunar tarde y terminar comiendo temprano. Como tirarse toda la mañana comiendo, vamos. Pues en vista de la hora en la que comimos ayer, Jordi y yo acuñamos la nueva palabra "linner", "lunch & dinner", y es que hartarse de comer a las 5 y pico de la tarde hace imposible cenar nada luego. Pero bueno, mejor así, que duda cabe.
Hoy parecía que estabamos en España. El viernes también llegaron unos amigos de Eduardo desde Soria que vienen a buscarse un coche para llevarse de vuelta. Pues nos han traido unas fantásticas chuletas de cordero que estaban que tumbaban, así que hicimos ¡barbacoa en la terraza de la cocina! No sé como no nos han denunciado, jejeje. Menos mal que vivimos en el quinto y solo tenemos por encima a los del ático, que si no... Aunque eso sí, los del ático bajaron a preguntar asustados si se quemaba algo... ¡¿Algo?! Estos no tienen ni pajolera idea, confundir un fuego cualquiera con unas chuletitas de cordero. Si a eso le sumamos el embutido y el queso como condimentos de picoteo... hoy hemos hecho otro "linner", jejeje. Hoy tampoco hay quien cene...
Dos días sin cenar... ¿estaré volviendome loco? Jajajaja, lo dudo.
Otro finde menos, mañana a currar de nuevo, a ver si vamos a esquiar el finde que viene por fín.

jueves, noviembre 16, 2006

¡¡¡¡¡Uyyyyyyyyyyy.... al palo!!!!!

El otro día hablaba que lo peor que le puede pasar a un bloguero es que se le cuelgue el ordenador, pero hay algo peor. Lo peor que le puede pasar a un friki de la informática es que se le vaya al carajo el ordenador.
Es que soy carajote.
No os preocupeis, ¡¡¡voy a casarme con ella!!! (ups, que me sale la vena Jorge Berrocal), que no es que haya petado el ordenador. El ordenador está bien. Lo que se fue a tomar por culo ha sido el sistema operativo. Eso me pasa por trastear con el linux que tengo instalado y mosquearme y borrarlo... cargandome el gestor de arranque de paso. Como este post está quedando un poco friki y muchos de los que lo leéis os importa un pimiento todo esto, lo resumiré fácil. Me cargo el sistema operativo, me descargo 2 linux distintos por problemas instalando, instalo uno y arreglo el windows de camino.
El caso es que aquí estoy de vuelta de nuevo, sin haber perdido nada de información ni nada importante (compraos un disco duro externo y seréis más felices), con el eMule funcionando y muerto de sueño.
Lo de ir este finde a la nieve queda descartado (¡¡¡hace calor!!!) y al paso que vamos no la pisamos en varias semanas... Hombre, calor, calor no hace, pero hoy se podía estar durante el día en mangas de camisa sin ninguna pega.

Por cierto, pensando sobre unas pocas de cosas (siempre que no estoy trabajando estoy pensando básicamente en dos cosas, qué escribir en el blog, sobre qué escribo el próximo cuplet) me he dado cuenta de una cosa: Nunca dejé aquí escrito mi nuevo número de teléfono alemán. Poco antes de ir de vuelta a España en septiembre me hice un contrato con O2 y cambié el número, pero con las cosas de irme para casa y todo el ajetreo, me olvidé por completo de dar el número... así que apuntad este y olvidar el anterior:

+49 176 63 10 51 15

Ahí queda.

Por cierto, aunque Macamen llega mañana y se quedará un par de semanas, intentaré sacar tiempo para seguir escribiendo el blog como hasta ahora.
Queda dicho.

P.D: Vaya susto me he pegado, si es que me pasa todo a mí... Cuando le voy a dar a publicar para colgar esto va y peta... Resulta que los de Blogger están con el servidor de mantenimiento y lo tendrán así unos diez minutillos... Habrá que esperar para colgar estás pamplinas de hoy. Si lo estás leyendo, es que todo se solucionó sin más problemas. ¡"Orviamenste, pisha"!

miércoles, noviembre 15, 2006

Deduciendo

Bueno, antes que nada cagarme en to lo que se menea... ¿Qué es lo peor que le puede pasar a un bloguero? Pues que se te caiga el ordenador y se vaya todo al carajo cuando llevas medio post escrito con la consiguiente pérdida de lo que ibas a contar... Resultado: mosqueo y vuelta para la cama por la falta de ganas de volver a escribir todo otra vez, mañana (hoy) sería otro día.

Pero bueno, superado el trauma del bloguero (jejeje) paso a relataros una curiosa anécdota que me ha ocurrido hoy.

Resulta que estaba en el Saturn hace un rato bicheando una cosilla y me decido a comprarla, por lo que me dirijo a la salida, donde están las cajas. El Saturn es un puñetero caos. Para aquellos que ya hayáis pisado un MediaMarkt os diré que es la misma porquería. Tropecientas mil cosas para comprar y como en el supermercado, las cajas para pagar en la salida. Resultado: colas de cojones para pagar siempre. (Hoy estoy un poco resultadista, ¿no? Parezco Capello, carajo...) Bueno, la diferencia entre España y Alemania es que donde en España habría 3 cajeras con una cola de morirse (véase por ejemplo Carrefours diversos o Día's atestados) aquí están a pleno rendimiento todas las cajas con personal. Al final la espera es bastante corta. Total, que me pongo en una cola y cuando me estoy acercando hasta la cajera me fijo en lo siguiente:
- Lleva un pin en la solapa con la silueta de España y coloreada con la bandera.
- Lleva otro pin redondo con la bandera y el escudo monárquico.
- Lleva una banderita de España en la pulsera del reloj.
- Lleva una bandera de España en la credencial que lleva en el pecho.
Ante semejante compendio de pistas no me queda más remedio que fijarme en que se llama J. Goicoechea (nombre bávaro de toda la vida, vamos) y sospechar que quizas estuviese ante una compatriota. Sí, sí, sé que no es una apreciación directa y que quizás estuviese aventurandome en un juicio prematuro, pero parecía que llevaba razón (nótese la ironia). Total, que como a uno le gusta ir encontrandose a compatriotas por el mundo, por aquello de que te entienden y todo eso (bueno, no sé si le pasa a todo el mundo, pero a mí siempre me llama la atención cuando escucho hablar español en el extranjero, es como "mira, otro que se ha perdido, jejeje"), decido intentar que se cosque de que yo también soy español, por testear nada más. Así que de entrada saludo con un "hola (en español en el original)" y cuando me pregunta el PLZ (código postal) me pongo a pensar en voz alta: "Achtzig... joe como era..." así que me mira, mira el nombre de la tarjeta de crédito y me suelta: "¿80 y qué más?". Jejeje, no soy yo nadie deduciendo... ¡Tiembla Colombo!
Bueno, después de decir un par de chorradillas más en español me fui riéndome de mi sagacidad y avispamiento...
Para los que piensen que estaba intentando ligar... ¡NOOOO! (que te veo venir, gordo) Digamos, por no ser crueles, que la chiquilla era poco agraciada (más fea que pegarle a un padre con un calcetín sudao y pedirle la paga, vamos) así que nada más lejos de mi intención. Solo que te llama tanto la atención que alguien haga ostentación de la patria de esa manera por lo poco acostumbrados que estamos a eso... Yo voy con mi pulsera y el colgante para el Ausweiß del Cádiz haciendo un poco de cadismo por el mundo... ahora que está la cosa chunga. Por cierto, aquí en Alemania el tema de las pulserillas de goma de colores como que les llama un poco la atención, por lo que se ve no tuvo mucho mercado aquí.

En cuanto a lo demás poco que contar, trabajando mucho haciendo alguna horilla extra para compensar las que perderé el viernes al ir a buscar a Macamen al aeropuerto.

Joder, que poco queda.

domingo, noviembre 12, 2006

Ni puta idea de nada

Estos teutones no tienen ni pajolera idea de nada. Ayer estuve todo el día fuera con Vevi, Edu y Jordi. Por la mañana fuimos a una especie de feria de muestras. Algo así como FIBES en Sevilla o IFEMA en Madrid, donde se hacen convenciones y ferias diversas. Hasta ahí, todo parecía interesante. El problema fue al llegar, jejeje.
Ibamos porque a Vevi le interesaba una Kreative Messe que se organizaba allí. Traducido resulta algo como una feria sobre las manualidades y los hobbys. A Vevi le encantan todas las manualidades y pinta bastante bien. Yo tengo en mi habitación un cuadro suyo y uno que pinto Macamen con su ayuda para mí. Uno se supone que son un montón de flores amarillas pero a mí me recuerdan a un montón de maßes de cerveza vistas desde arriba (sí, estoy como una regadera, lo sé) y el que me hizo Macamen es uno muy chulo que no sé como definir.
Pero volviendo al tema de la Messe. Digamos que al final de lo que se trataba es de que todas las tiendas que venden cosas de manualidades de München habían montado allí su stand y estaban vendiendo sus productos y haciendo sus demostraciones y todo eso. No es que fuera gran cosa, la idea principal era dar a conocer su catálogo y vender, vender y vender. Pues bien, aquí es donde yo me pregunto. ¿Por qué carajo cobraban la entrada? No lo entiendo, si lo que quieren es venderte sus productos, es mejor que entre cuanta más gente mejor, ¿no? Y si todavía te cobrasen uno o dos euros por la entrada, tendría un pase, pero ¡¿7 lerus?! Como diríamos en La Isla ¡¡¡Tesquiyá ome!!! ¡¿Onde va carajo?!
Pues eso, por motivos obvios, tanto Eduardo como yo nos quedamos fuera y no entramos, e incluso intentamos buscar alguna feria alternativa que fuese interesante. Había una feria sobre vinos y una de juegos y jugueterías. A cual peor, 8 lerus la de los juguetes y ¡15 euros! la de vino. Por quince lerus me compro una botella buena y me la bebo más a gusto que entrando en la feria. Nada, nuestro gozo en un pozo, y como digo en el título, estos no tienen ni puñetera idea de nada.
El resto del día lo echamos en un centro comercial de comprillas. No compré gran cosa, tan solo unos zapatos chulos para salir que ya enseñaré por solo 30 eurillos. Bueno, eso y el DVD de "La naranja mecánica" (clásico genial de S. Kubrik) que encontre en el Saturn por solo 6 lerus con la suerte de tener los idiomas de alemán, inglés y castellano en 5.1 remasterizado.
El domingo ha sido casero. Aproveché para limpiar un poquillo y cocinarnos un pucherito con mucho arte. El puchero ha salido bastante bien, pero tengo que cogerle el punto a la sal. La sal de aquí es bastante porrillera e incluso tienen que yodarla porque, sorpresa, la sal es de las minas de sal que hay por la región y no marina. Toda la vida viviendo en la isla con nuestras salinas, no sabía que también había sal de consumo humano sacada de la mina. Incluso la ciudad de Salzsburgo (Salz - sal, burgo - ciudad) nació de las minas de sal que hicieron ricos en su tiempo a sus ciudadanos. Por lo visto es impresionante visitar las minas de sal que hay. Habrá que echarles un vistazo.
Mañana es otra vez lunes y hay que volver al curro, pero esta semana la cojo con ganas. Estoy deseando que llegue el viernes que llega Macamen para pasar dos semanitas aquí conmigo. Creo que en ocho años que llevamos juntos va a ser el periodo más largo que vamos a pasar conviviendo juntos ¿no es así, amol? Seguro que nos va de escándalo...
Voy a seguir con mi droga particular, la serie 24 (viéndo ya la 5ª temporada, jejeje).

jueves, noviembre 09, 2006

Mu cortento

Pues eso, "cortentísimo".

Ayer estuve negociando con Carlos el trabajo para el año que viene. Puedo decir con satisfacción que hemos llegado a un acuerdo. Así que después de 6 meses y si todo sale bien, tendré contrato fijo en Alemania cobrando un sueldo decente. Por no hablar de las vacaciones. 30 días naturales para gastar cuando yo quiera, aunque eso sí, me fundo 5 por llegar el 8 de enero de vuelta de españa. La putada es que este año el día de Reyes, que suele ser fiesta, cae en sábado, así que no computa. Además, como aprender alemán es tan importante para mí como para la empresa, hemos llegado al acuerdo de que con parte de mi sueldo bruto me paga un curso en el Goethe Institut para ir todas las tardes un par de horitas hasta que me suelte bastante en alemán. El negocio es bueno para los dos, porque él paga menos impuestos y yo me ahorro lo que me retendrían en impuestos si lo estuviese pagando yo de mi bolsillo. Al final, para entendernos, es como si lo estuviese pagando yo pero del bruto, no del neto. La diferencia es considerable. Aquí estamos levantando la Alemania del este todos nosotros, y el pellizco de hacienda es considerable, te clavan como un 45%. Pero bueno, en consecuencia, también te pagan más.
Otra cosa curiosa acerca de las tasas alemanas el hecho de los impuestos por religión. Aquí, al hacer el Anmeldung (el registro en el país) tienes que decir que confesión religiosa profesas. Ésto, que en primera instancia puede parecer un poco feo, que te pregunten por tu religión no está muy bien visto que digamos, tiene su sentido. Te retienen impuestos para sufragar a la religión que decidas. El pellizco no es nada pequeñito, podemos hablar de unos 70 lerus mensuales que te quitan de la paga para darselo a la Iglesia Católica, Musulmana o cualquier otra que contemplen. Ni que decir tiene que yo he puesto un grande y enorme NO en la casilla de religión. No solo por mi ateísmo recalcitrante, sino porque encima les va a pagar... (como decía aquella cantinela) ... su puta madre. Pero me parece fantástico, mucho mejor que en España, que aunque tu no quieras pagar a la Iglesia Católica porque te infla un poco la zona testicular los comentarios ignorantes, homófobos y clasistas de la Conferencia Episcopal luego llega el gobierno y les suelta la pasta que los contribuyentes decidieron no pagar hasta completar el cupo... porque sí. Aunque recientemente creo que eso ha cambiado por algún acuerdo al que llegó De la Vega con la Conferencia Episcopal, pero ya estaba yo en Alemania y no me acuerdo.
Bueno, lo dicho, del dinero no hablo que me parece una grosería, jajajaja. Pero está bien, muchísimo mejor que en España, valga decir. Animo desde aquí a todos mis compis de la escuela a que intenten la aventura alemana que renta, aunque eso sí, aprended algo de alemán antes de venir que todo el mundo no va a tener tanta suerte como yo... aunque yo os la deseo, por supuesto.
La segunda cosa buena del día es que Joselito Contero, compi del coro, se ha acordado de mí y ha tenido a bien enviarme por email la música y la letra del primer cuplé de este año. ¡¡¡Me encanta!!! Como el cabronazo de mi primo pasa de mí como de la mierda, ha tenido que ser otro el que se acuerde de mí. Como compensación, ya le he enviado de vuelta uno que se me ha ocurrido hoy con una idea que tenía guardada. Espero que les guste a todos.

Increible, pero mañana ya es viernes... se me ha pasado la semana volando. Hoy estaba lloviendo en München, así que puede que estuviese nevando en la montaña. A ver si podemos ir a esquiar este sábado.

martes, noviembre 07, 2006

Lo peor de lo peor

Pa echarme...

A veces uno se pregunta, porqué Andalucía, teniendo lo que tiene, es el culo de España. Nuestros políticos se dedican a pelearse por gilipolleces como la realidad nacional y todas esas pamplinas antes que meterle mano de verdad a los problemas que sufre nuestra comunidad, pero la verdad es, que viendo Canal Andalucía Internacional, uno se puede dar cuenta de muchas cosas.

Sé que esta reflexión no viene mucho a cuento ni tiene que ver demasiado con el tema del blog, pero explicaré a continuación el porqué de todo esto.

Resulta que aquí en Alemania, ya os he hablado de ella, lo de la tele es un poco pestiño. Si además le añades que entendemos de alemán más bien cortito y con sifón, sentarse a ver la tele alemana, que puede ser todo un ejercicio de aprendizaje, no lo dudo, es más bien un tostón insufrible. La verdad es que desde que estoy aquí no veo mucho la tele, más bien estoy enganchado a chorrocientas series americanas que me descargo con la mula y me veo subtituladas, pero eso es harina de otro costal.

Volviéndo al tema, diré, que si encima le añades a la tele alemana, que podemos ver en casa algunos canales españoles... pues no hace falta añadir mucho más, ¿no?

Claro, que eso de canales españoles... es un decir. Y no porque no lo sean, sino porque vemos TV3, que normalmente es en catalán y es dificilillo de seguir; ETB, que hablan mucho euskera y es imposible; TVG, que en gallego y hablado por gallegos así rápido y todo, es como imposible; y Canal Andalucía Internacional, con la programación más pestiño de la tele. Joder, es impresionante, os lo prometo. Siempre he estado en contra de las televisiones públicas, ya lo sabéis, al final se convierte en instrumentos de poder para la propaganda política del partido de turno que la controle, así que creo que hacen más mal que bien. Siempre he apostado por una televisión pública sin noticias. Ya que no son capaces de hacer informativos neutros, por lo menos que no sufraguen las harengas políticas con mi dinero. Pero bueno, el caso de Canal Sur es ya de chiste. Os diré como hacen la televisión que envían como canal internacional: Coges lo peor de Canal Sur, lo peor de Canal 2 Andalucía, lo metes en la batidora, lo mezclas y lo envías para que todo hijo de vecino vea la terrible televisión que tenemos en casa. Pero horrible de verdad. Siempre he dicho que el Canal Sur es para los "agüelos", pero es que es demasiado. Yo me puedo imaginar la cara que tiene que poner un alemán que haciendo zapping y viendo a Juan y Medio con los "agüelos" ligones a media tarde... todo un espectáculo.

Si a Juan y Medio le sumas Arrayán, y dos programas más peores aún, te sale la fórmula televisiva esta. Lo único que me interesaba son los resúmenes del fútbol de los domingos pero echan el programa de Agustín Bravo, y para colmo el fútbol de la Forta ahora lo tiene La Sexta...

Bueno, después del despotrique general contaros que esta tarde he estado completando lo que me falta para la equipación de esquiar (a ver si podemos ir este finde), y me he comprado un casco (por si me despeño no matar a nadie de un cabezazo) y unas gafillas de ventisca molongas. El desastroso aspecto resultante lo podéis observar en la fotillo perra que me he echado con el móvil hace un momentín. El retonno del hombre mosca. Jurl, jurl.

Y para colmo de todos mis males... también se ve ¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡Real Madrid Televisión!!!!!!!!!!!!!!!!! ¿Qué he hecho yo para merecer esto?

lunes, noviembre 06, 2006

Aburrimiento

He encontrado tiempo para aburrirme, increible pero cierto. Este fin de semana me lo he podido tomar con muuuuuuuuucha calma. Carlos y Anna estaban en París con la familia, Jordi en Berlín con sus padres, Lluís en Lugo con Leticia y Edu y Vevi acompañando a los padres de él por München que han estado por aquí desde el miércoles pasado.

Con semejante plan me abandoné a uno de mis mayores placeres que tenía largamente olvidado. Rascarmela... la barriga, claro.

Me he pegado todo el finde entretenido viendo alguna peli, episodios de las muchas series a las que estoy enganchado y de las que hablaré en otro post y salir a dar una vueltecilla para vencer el frío desapacible aquí en München, pero poco más.

Eso sí, en mi línea investigadora de nuevas formas culinarias he descubierto, de la mano de mi gran compi de piso Sergio, un griego más o menos cerca de casa que vende comida para llevar. Aquí en Alemania, lo de llevarselo a casa (algo como "Zum Mitnehmen") es algo que se estila mucho. Pues dicho y hecho, el sábado nos acercamos Sergio y yo y compramos musaka auténtica griega en el sitio de marras. He de decir que estaba muy buena y que además probamos un dulce hecho con miel y hojaldre que también estaba bastante bien.

De momento la semana se presenta movidita en el curro, mucho que hacer y fuera de ahí no ha empezado mal. Carlos nos ha invitado hoy a cenar a algunos por motivo de su cumple el pasado viernes. Estamos todos deseando que caiga más nieve e ir por fin el fin de semana que viene a esquiar. Veremos como se da todo.

viernes, noviembre 03, 2006

¡¡¡¡¡Nieve!!!!!!

Alrededores de BMW esta mañana

Ayer me quedé flipadillo al bajar del U Bahn al ver como sobre los jardines cerca de BMW había nieve. Por lo visto había estado nevando por la noche. Durante la tarde en el curro empezo a nevar. Es la primera vez que veo nevar. Bueno, la primera fue en Praga durante la excursión de 3º de BUP, pero no era tanto y hace eones de aquello. De todos modos solo eran algunos copillos ligeros, nada del otro jueves. Eso sí, hacía un frío "pasuputamadre". Según www.weather.com, estabamos a 0º con sensación térmica de -7º. Pero un buen abrigo, una bufandita y pa la calle a disfrutar.

Lo de esta mañana ha sido otra cosa. Al levantarme como buenamente he podido por la mañana me dice Vevi que estaba ya despierta: "¿Has mirado por la ventana?". ¡¡¡¡Que barbaridad!!!! Vaya manera de nevar, se veía solo blanco por la ventana. Estaba nevando y fuerte, una flipada. Eso sí que es nevar y no lo de ayer. Al bajar a la calle estaban todos los coches con una capita considerable de nieve y al llegar a BMW se veía todo como podéis observar en las fotos. Sé que esto no es nada para lo que me espera, pero hace ilusión, ¡hoygan!
De todos modos las temperaturas han subido un poco luego a lo largo del día y la nieve se ha derretido toda prácticamente. Eso tiene su parte mala, significa que probablemente llueva este finde, pero bueno. A ver si el finde que viene podemos ir a esquiar por fin.

Jardines junto a BMW esta mañana

jueves, noviembre 02, 2006

Vagancia

El de la cara de nabo es Fermín... mira que le gusta hacer posturitas...

Aquí también se celebran los "tosantos", aunque aquí se conocen como Allerheiligen. Baviera es la zona católica alemana y como tal mantiene las mismas costumbres religioso-institucionales que nuestro pais.

De todos modos, los largos brazos de los americanos se extienden por todo el mundo y por aquí creo que celebran eso del Jalogüín más que nosotros. Resumiendo, ayer fue festivo aquí como en España.

Ayer también fue el día en el que se fueron Fermín y María José. Creo que se lo han pasado bastante bien y que les ha gustado mucho Munich. Para despedirnos y aprovechando de que el miércoles era fiesta nos fuimos todos a cenar a un sitito muy chulo cerca de la casa de Jordi, por Rosenhaimerplatz. Es un restaurante de pasta donde te la preparan delante tuya. Hacen el acompañamiento como en un wok delante tuya, cuecen la pasta y luego tel o sirven. La verdad es que se come muy bien y merece la pena. Aproveché para estrenar algo de ropa que me he comprado. El martes me fui de compras en plan "fashion", jejeje, y me compré un par de camisas y corbatas muy chulas, junto a un par de pantalones. En cuanto pueda cuelgo una fotillo con mis amigos la noche de la despedida. Lo único malo es que me hace falta es un puñetero pelado, que tengo ya pelos para peinarme dos flequillos. El problema es que no sé como explicarle al peluquero como quiero que me pele, jejeje. Supongo que al final tendré que jugarmela y que lo haga como le de la gana, pero bueno.

Sé que he estado un poco desconectado estos días, pero aprovecho la recarga de pilas de ayer (me dediqué a la vagancia pura y dura, tan solo puse una lavadora y me tiré a ver pelis y series en el portátil y jugar un poco a la 360) para retomar el posteo con más ganas.

Solo unos cuantos mensajes personales:

- Amor, tráete ropa de abrigo cuando vengas que aquí hace más frío que pelando rábanos...
- Fermín y María José, gracias por venir y aprovecharos del cobijo by the face que ofrezco, me ha hecho mucha ilusión recibir visita de amigos por primera vez (amigos, cari, amigos, la tuya es otro tema).
- Juanmita, pisha, no coincidimos ni para atrás en el messenger. Tu estás en el coro ensayando y supongo que no nos cruzamos mucho. Un abrazo pisha, que nos veremos prontito en Navidad.
- José Antonio, eres un mamón, me tienes abandonado y no me mandas nada del coro. Mándame un correito con las letras y el cuplé, pisha...

domingo, octubre 29, 2006

Fermín y María José

¡¡¡¡He recibido la primera visita española!!!! (Sin contar a mi queridísima novia, claro está)

Genial. Llevamos todo el finde para arriba y para abajo. Bueno, lo que se puede aprovechar de finde porque llegaron el sábado sobre las cinco y algo al aeropuerto.

Fermín y Maria José son unos amigos míos de Sevilla. Al cabronazo del Fer lo conocí una noche en internet en un chat de mano de mi amigo Antonio con el nick más moña de la historia de los nicks, "Cilantro". Se dedicó a darme canoa a muerte esa noche y las siguientes, y a mí, como me va la marcha, me jarté de reir. El resto es historia.

El caso es que cogieron unas vacaciones relámpago y pillaron el vuelo. Aquí están hasta el miércoles, y aunque yo no ya no podré hacerles mucha compañía (por aquello de que trabajo y todo eso) por lo menos los mando a sitios interesantes. Hoy me los he cargado llevándolos a comer un codillo a un Agustiner... Jajaja. Les ha encantado, pero Fermín todavía está echándolo por las orejas (Tranquila mamá, yo he comido pato... jejeje). Luego su correspondiente Apfelstrudle y por la tarde, cuando ya no podíamos más de andar y de comer, partidita de Trivial en casa de Carlos y Anna con todos estos.

Lo único malo de todo esto es que ya es domingo otra vez, y casi no me ha dado tiempo de darme cuenta.

Fermín y María José son los primeros, espero que se apunten muchos más, jejeje.

P.D: Dicen que el sofá cama del salón es cómodo...

viernes, octubre 27, 2006

Ataque de morriña

El coro del Monti el año 2007 se llamará "Brigada 69"

Definitivamente, quitando a mi novia, mi familia y mis amigos (en grande, negrita y cursiva para que nadie se salte la frase y lo interprete mal), lo que sin duda alguna echo más de menos es mi coro.
Sé que suena raro, que España tiene un montón de cosas que uno podría echar de menos como el tiempo, la gente, la tele, el gran hermano y todo ese tipo de cosas que deberían gustarle a uno más que nada en el mundo, pero no, yo lo que echo de menos es a mi coro.
Y es jodido, porque el año tuve la suerte de poder involucrarme a muerte en el coro y descubrir como todos los sinsabores que tiene la organización de algo (que contaros del viaje fin de carrera o el tecnológico que no sepáis muchos de vosotros) te hacen , después, disfrutar mucho más del resultado obtenido.
A mí me gustaría escribir más coplas (tengo algunas ideas, pero no la música), me gustaría ensayar todos los días y partirme la garganta con ese falsete maricona que no me sale nunca. Me gustaría reirme cuando sale bien y enfadarme cuando sale mal. Me gustaría echarle cojones e intentar que la gente no se mosquee cuando el mamón de mi primo chilla, que todo salga bien. Me gustaría tener el mejor coro, con las mejores letras, con la mejor música, el que más enganche a la gente... soy un puñetero perfeccionista. Pegarme los madrugones con el Piti para ir a arreglar la batea (tu también te lo estás perdiendo, amigo, pero Baeza queda un poco más cerca que München, jejeje).
Pero no pasa nada. La putada de elegir esta carrera es que jamás habrá curro en Cádiz, así que viviré siempre a caballo entre Cádiz y donde narices curre. Hace ya muchos años que lo acepte y estoy muy contento. No se puede tener todo en esta vida, dicen y puede que tengan razón. Aunque yo tengo una familia que me quiere, una novia maravillosa que me apoya aún a 2500 km., unos amigos de la polla y el mejor coro del mundo, "EL CORO DEL MONTI". Este año, Brigada 69.

¿Quién se quejaría con todo esto?

miércoles, octubre 25, 2006

Sevillanaaaaaaa Japonééééééééééée

Rememorando al mítico Ángel Garó en aquellos programas del Un, dos, tres míticos donde hacía de japonés que enseñaba sevillanas, hoy presentamos el curso básico de supervivencia en Alemania.

Se me ha ocurrido mientras me duchaba (otros se la cascan, yo pienso, que aburrido, ¿no?) que al igual que cuando yo vine aquí me hico falta aclimatarme durante un tiempito y aprender lo básico para sobrevivir, quizás a vosotros os vendría bien un cursillo avanzado de alemán de estos de andar por casa. Como el Muzzy de toda la vida, pero en plan... "cogerloahí".

Todo esto viene de mis clases de alemán, donde aprendo el idioma de la cerveza junto a una patulea un tanto curiosa, cada uno con nuestros problemas.
Sus cuento. En la clase somos (a ver que cuento...) 6 alumnos cada uno de su padre y de su madre... patria. Hay dos chicas de nombre impronunciable (todavía no consigo distinguir uno de otro) que "creo" son rumanas o algo así porque las oigo hablar entre ellas en algún dialecto perdido de la europa profunda. También está el gabacho, Vincent, que con ese puturrú que tienen hablando en la boca pronuncia peor que yo, que ya es decir. Tenemos a una tal Jessica, una chica jovencita que llega todos los días a clase con un camarón (no de comer, de las de "afotos") mu grande, no sé si será fotógrafa porque tiene pinta de ser demasiado joven. No tengo ni idea de su nacionalidad, pues llegué un día a clase y estaba ella y nunca nos presentaron. El quinto en discordia es un chaval de Togo, negro como los cojones de un grillo y que tiene un nombre que me hace un montón de gracia y que pronunciado suena como "Güenaso". No me preguntéis como se escribe, a saber. Solo le pido al mundo que luego no sea un cabrón que le pegue a la novia, porque con ese nombre... vaya crimen (que le pegue a la novia, digo). Por último y no por menos importante, estoy yo, que con este acento gaditano que La Caleta y horas y horas escuchando al Yuyu me dieron, hace más que imposible que pronuncie un alemán decente. Pero claro, teniendo en cuenta que uno de los sonidos más importantes en el alemán es la "j" y que nosotros en cadiz no hemos pronunciado una jota decente en la vida (ya no te digo cantarla... jajaja).

Pero bueno, lo dicho, trataré de transmitiros algunos conocimientos básicos de subsistencia por si algún día decidís hacerme una visitilla (aquí tenéis vuestra casa, como díria Reguera, pero yo sin bajarme los pantalones, que luego os gusta :-p) o por si venís por Alemania algún día. Si vemos que la cosa se alarga los desglosaremos en varios posts. Lo haremos de la siguiente manera: en categorías, iré escribiendo una frase, en paréntesis cómo se pronuncia y luego el significado y uso de la misma.

  • Básicas y necesarias justo al aterrizar.
    • Danke (Danke): Gracias. Hay varias variantes para agradecer. Tenemos el Danke schön (Danke shon), Vielen Dank (Filen Dank) y otros sucedaneos, pero siempre que escuchemos el "dank" es que no están dando las gracias.
    • Bitte (Bite): De nada. También significa por favor. Es una palabra comodín que tiene otros usos avanzados y que encontraremos en lecciones posteriores del curso.
    • Ja (Ya): Sí. Simple, ¿verdad?
    • Nein (Nain): No. Más simple todavía.
    • Ich spreche nicht Deutsch (Ij eschpreje nijt doitch): No hablo alemán. Encima si pones cara de pena la gente sonríe y una de dos, o te habla en inglés o se va por dónde ha venido. La primera opción se convirterá en la segunda cuando vea que tampco chapurreas el inglés y que eres otro españolito matraca que viene con una mano delante y otro detrás. Un consejo, repasa el inglés, te hará falta, jejeje.
    • Entschuldigung (Enchuldigun): Disculpe, perdone. Imprescindible para mantener las formas a la hora de pedir a alguien que deje de dar por culo en el metro y que se quite que estás en tu parada y no puedes salir o cualquier otra necesidad perentoria de llamar la atención de alguien. Por cierto, el "Illo pisha" aquí no sirve para que te presten atención. Lo he comprobado, jejeje.
    • Ich mochte ein Bier, Bitte (Ij mojte ain biar, bite): Quiero una cerveza, por favor. Absolutamente imprescindible. Llegar a Baviera y no tomarte una birra es poco más que sacrilegio. Por cierto, lo de la cerveza se puede sustituir por una Weißbier (baisbiar) y te pondrán una fantástica cerveza de trigo auténtica alemana.
    • Wo ist ein MacDonalds, Bitte? (¿Bo ist ain MacDonalds, por favor?): ¿Dónde hay un MacDonalds? Existe una sencilla variante a esta pregunta que consiste en cambiar MacDonalds por Burger King y tienden a entenderlo, fijate que cosas. Con esto ya sois capaces de comer y de beber en alemania, pa que no os quejeis. Una vez en tan glamurosos restaurantes podréis haceros valer de vuestra habilidad señaladora con el dedo para que el encargado entienda que menú queréis. Baste con decir que Eins, Zwei y Drei (Ains, Esbai y Drei) son 1, 2 y 3 respectivamente, con eso bastará para pedir. Pero tendrá que ser en sitios distintos, porque la cerveza en el MacDonalds como que no...
Creo que hemos hecho una primera aproximación más que interesante al idioma teutón. Ya podemos pedir lo básico (cerveza y macdonalds) por lo que saciaremos el apetito acumulado durante el vuelo que si fue con Iberia, fue sin comida y si fue con otra compañía, era tan ridiculo que todavía te comerías dos más como el que te pusieron.

En siguientes entregas, siempre que interese, explicaremos como salir del aeropuerto y pillar un tren hasta Munich.

domingo, octubre 22, 2006

Sírvase usted mismo

Mano a mano con el codillo y las kartofelnknödeln
(eso que parece una patata asada, pero no lo es)

Hay cosas que, directamente, jamás funcionarían en España.
El domingo hemos ido a comer Vevi, Jordi y yo, aprovechando que estos siguen en
Grecia y estabamos solos aquí en München. Como decimos de coña por aquí, nos adentramos en la Bavaria profunda. La verdad es que los paisajes son una pasada. Bosques enormes llenos de árboles de hoja caduca, lagos, casas típicas bávaras de madera y ladrillo. Todo muy bucólico, la verdad.
Lo de menos es el codillo y el apfelstruddle que nos jamamos... jajaja.
Después nos llevo Jordi a Tegernsee. Uno de los muchos pueblos pegados a los lagos que por aquí abundan que son auténticos. Allí nos comimos el Apfelstruddle que es un postre hecho con hojaldre y manzana muy típico bávaro y que se sirve, o bien con helado de vainilla y nata o con natilla caliente. Sobra decir que está mortal...

Foto maricona con el crack del Jordi al pie del lago... vaya tela...

Camino de Tegernsee pude percatarme de dos cosas curiosas.
La primera, que en Baviera tienen el dinero por castigo. Lo digo en serio. Yo no he visto mayor desfile de cochazos juntos en mi vida. Nunca había visto tanto Porsche junto. Lo digo en serio. Sé que soy gaditano y que sería capaz de decir que he visto trescientos millones de porsches puestos en fila en la carretera, pero siendo sinceros, en mi vida había visto 3 Carrera S4 en fila india... y no fueron los únicos que ví. Ya no hablo de Audis, Mercedes y BMWs porque aquí son los coches de andar por casa. No en balde los fabrican aquí. BMW fabrica aquí y Audi en Ingolstadt que está a 40 minutos de München. De hecho, para quien no lo sepas (esto no va por tí Manué, obviamente) BMW significa Bayerisches Motoren Werke, algo así como Trabajos de Motores Bávaros.
La segunda, el selfservice. Pero no de comidas, sino de flores y calabazas. En medio de la carretera un campo de flores con un cartel de "Córtela usted mismo" y un palo con una hucha colgando. ¡¡¡Estos suponen que tu te paras, cortas, pagas y te vas!!! Que envídia... En españa en media hora no había ni flores, ni hucha ni nada, así de triste. Incluso con el rollo de Halloween, también había montoncitos de calabazas en medio del campo también con su huchita y toda la historia. Que civilizados estos teutones.

No quiero despedirme sin felicitar a ¡¡¡¡¡ALONSO!!!!! Campeón del mundo de Formula 1 otra vez. ¡¡¡OEEEEEOEEEEOEEEEEOEEEEEOEEEEEEEEOEEEEEEE!!!
Alucinante, aunque aquí no pudimos ver la victoria de Alonso, solo pudimos saborear la derrota de Schumacher. Igual que el calvo de Telecinco (Antonio Lobato) da por culo con Alonso en España, aquí el que da la vara con Michael es Niki Lauda. Que por cierto, ayer me enteré que tiene una línea aérea comercial, que cosas... Pues eso, que tuvimos que conformarnos con ver a Alonso de chiripa y de refilón porque aquí lo importante para la RTL era que Massa había ganado en Interlagos y poco más. Menos mal que siempre nos queda el carrusel deportivo y la prensa española por internet...
¡¡¡Qué grande eres!!!

sábado, octubre 21, 2006

Esquiando... sin nieve

Vaya dos noveleros, con las etiquetas colgando y todo

El invierno es cercano al siberiano aquí en München o por lo menos eso es lo que me han dicho. Eso limita en cierto sentido el ocio por aquí. No puedes salir a pasear ni hacer nada que implique estar en la calle expuesto a las bajas temperaturas. Así que todo lo que se puede hacer es ir a un bar, un restaurante o cualquier cosa cerrada donde las calefacciones te fríen y te obligan a desvestirte. Para aquellos que conocen el invierno es algo parecido, y para aquellos que hemos sufrido en la escuela y la sala de estudios en los laboratorios, es tanto de lo mismo.

¿Qué se puede hacer durante el inverno que tenga que ver con el frío? Pues está claro, esquiar. A mis amigos aquí les encanta esquiar y van un montón de veces durante todo el invierno. ¿Qué mejor manera para pasar los findes fríos que deslizandote como un "kamikaze" por las pistas alpinas. Porque la ventaja de München es que los Alpes están a unas 2 horitas...

Me encanta la idea. Hace millones de años que quería aprender a esquiar. Me parece un deporte fascinante, como todos los que me gusta prácticar. Rugby, parapente, escalada... Sí, creo que soy un suicida en potencia, jajajaja. El problema por el que no lo había hecho antes es por la pasta. No es un deporte barato. Comprarte la equipación para empezar es un pico y cuando era estudiante, mis chapús sirviendo mesas y montando redes de ordenadores por aquí y por allá nunca dieron para tanto. Pero ahora curro y me lo puedo permitir. Así que hoy nos hemos ido Jordi, Vevi y yo de compras por München. Vaya día... Hemos ido a tresciantas tiendas dando vueltas como peonzas pero me he comprado gran parte del equipo. Ya tengo unos pantalones, una chaqueta, unos esquís con las sujecciones y las botas. Lo de las botas ha sido un show. Resulta que con el gemelo este hiperdesarrollado mío no había manera de que me cerrara una bota y he tenido que llevarme la que buenamente cerraba, jejeje. Pero está chula. El resultado, lo podéis ver en la foto de arriba junto a lo que se ha comprado Vevi.

Ahora que lo veo, es todo como muy rojo... lo que tiene su parte buena y su parte mala. Por un lado, pueden confundirme con los de la cruz roja, lo que es un coñazo, pero por otro lado, así no se nota tanto la sangre cuando me parta la nariz de un fostiazo, jajajaja.

P.D: Mamá, ésto último era una coña gaditana exagerada, no empieces a tomartelo mal que todavía quedan meses para que nieve. Si es que...

jueves, octubre 19, 2006

El barco del arroz

Haytham es el nombre de pila de la criatura.
Se pronuncia algo así como "Jayzam" y, para más señas, es libanés.
Como creo que comenté anteriormente, está liado con su proyecto. Se supone que lo que hará aquí le servirá como proyecto, pero yo tengo mis serias dudas.
Creo que es Ingeniero de chispa gorda. Para el que no lo entienda, diré que me refiero a que es Industrial de potencia y esas cosas, es decir, tiene más bien poquita idea de electrónica porque no es lo que ha estudiado.
Esto sería fantástico si no fuera porque el proyecto que está haciendo aquí lo va llevar a la calle de la amargura. Creo que se han equivocado al contratarlo para esto. No tiene ni puñetera idea de electrónica y se me pierde más que el barco del arroz. Así que se me pasa el día preguntandome cosas que me ponen los pelos de punta alguna veces, no porque me moleste contestar, todo lo contrario, sino por que me doy cuenta de que no va a sacar adelante lo suyo en un tiempecito largo. Que conste que esto no es una crítica, es como si a mí me pusieran a hacer un proyecto de trifásica y potencia o algo así, no tendría ni puñetera idea.
Lo que más nervioso me puso fue cuando me preguntó si una conexión de la plaquita del switch con la que está trabajando era una conexión de audio... tuve que corregirle amablemente y decirle que era el conector... ¡de la alimentación!
Por todo lo demás es bueno tener compañía. Siempre es agradable tener alguien cerca para echar un café o lo que sea.
Ahora le ha dado por el poker. Me cuenta de que de vez en cuando montan una timba en su casa pero sin jugarse mucho, de 10 a 20 euros por barba y se entretienen con eso. También le ha dado por jugar por internet y ayer venía quejándose de que había perdido 10 leurillos jugando el día anterior.
Le he hablado de los Pelayos y parece que le ha interesado la información. Para quien no lo sepa, diré que la familia Pelayo es una familia española que se dedica al juego de forma profesional y que tienen pasta para aburrir. Idearon un método matemático para ganar a la ruleta haciendo estudios estadísticos para cada mesa y fueron reventando casinos por todo el mundo hasta que les fueron prohibiendo la entrada en los mismos. Al final, tuvieron que recurrir a la justicia y un juez dictaminó que tenían derecho a entrar y jugar en los casinos porque su método no era trampa, solo matemáticas. No hace mucho escuché por radio una entrevista a uno que contaba que ahora estaban líados con el tema del poker por internet y de que el que se dedica más activamente al negocio era su hijo, que podía jugar hasta en 10 mesas a la vez por internet, jugando unas 10 horas diarias y ganando unos 100.000 lerus mensuales.

Me ha invitado a ir a la próxima timba que organicen, pero no lo veo claro. Los que me conocéis bien sabéis que no me gusta jugarme el dinero a nada, ni jugar a loterías, quinielas ni similares. Por no jugar no me jugaba ni el café en aquellas partidas de dominó a mediodía en la escuela antes de entrar en clase por la tarde como las mariconas enviciadas del Loren, el Enano, el Juaniki, el Versacce...

martes, octubre 17, 2006

Bricomanía

Que mejor cosa para hacer un domingo que levantarte temprano y dedicarte a Bricomanía. Pufff, en verdad se me ocurren un montón, a quién quiero engañar.

Tararará tararararara, tararará tarararara. Tararará tararararara, tararará tarararara. Tarararará, tarararará rara, tarararará, tarararará, tará.

Por si alguno no lo ha pillado, estaba tarareando la cancioncilla de Bricomanía.

El viernes después del curro me fuí hasta una megamacrohiperultraferretería de esas en plan Leroy Merlin, el OBI, y compré algunas cosillas que me hacían falta para semejante tarea. El domingo por la mañana hice mi poquito de masilla y me dediqué, con la espátula a ir tapando todos los boquetes de mi pared y algunos que pillé por la casa. El problema de vivir en un piso que va pasando de mano en mano, es que los distintos inquilinos hacen sus propios boquetes en las paredes que tienden a no encajar con los gustos del que viene después, por lo que la profusión de agujeros en la pared, es más que considerable. Además, en mi piso, nos desviamos un poco de la norma alemana con los alquileres, lo que no ayuda nada. Aquí en Alemania, la costumbre es que el que sale del piso de alquiler está obligado a pintar su habitación. En teoría está muy bien, pues te asegura que el que llega se lo encuentra limpio. Además, la costumbre es vender los muebles al que entra por tí en el piso. Pero en mi piso, por costumbre se deroga la obligación de pintar que recae en el que entra en el piso a cambio de no pagar nada por los muebles comunes, que hay unos pocos.

Es un buen trato. Pintar, sobre todo si lo haces tú, sale más a cuenta que pagar por los muebles comunes, que incluyen lavadora, sofás, congelador, televisión, etc. Lo que pasa es que como la responsabilidad de pintar recae en el que entra, pues no tienes obligación real de hacerlo, si quieres vivir con las paredes llenas de mierda, tú mismo. De todos modos, no es para tanto. Las paredes de mi habitación no están tan mal, tienen los típicos rayazos de muebles y eso pero no es para morirse. De todos modos, quiero pintar la habitación, y a lo mejor pinto una pared con un color claro que pegue, ya veremos.

Una vez tapados los boquetes de la pared, me puse a taladrar para poner espiches y alcayatas y colgar los cuadros y fotos que tenía pendientes. A Vevi le encanta pintar y me ha regalado un cuadro muy chulo que todo el mundo dice que son flores amarillas, pero a mí me recuerdan a un montón de jarras de cervezas juntas vistas desde arriba (creo que la Oktober me ha frito el cerebro, jojojo). Además, cuando estuvo aquí Macamen, me hicieron entre las dos un cuadro muy guapo que tengo sobre el cabecero de la cama. Además de los cuadros, me traje las fotos que nos hicimos el coro al salir del escenario en el Falla y las he enmarcado y colgado al lado del poster del cartel del coro de este año. Todavía me quedan detallitos para terminar de sentirme a gusto del todo, como colgar mi azulejo "Aquí vive un pisha de Cai" (sí, tengo uno, regalo de mis suegros y me encanta, me parece totalmente "caletero", jajaja, si no ?por qué me lo habría traído a Alemania?), o comprarme unas cortinas, pero todo se andará.

domingo, octubre 15, 2006

A "sien" no, a "dossientos" kilómetros por hora... jejeje

Los días caen como manzanas atraídas por la gravedad intrínseca de las cosas. El Otoño se cierne sobre nuestras cabez... bahhh, estaba intentando ser profundo como el blog de Juaniki, pero a mí no me sale igual de bien, jajajaja. Será que tengo menos fondo que un charco en Sevilla el 1 de agosto a las 4 de la tarde...

La semana pasa volando. El cumpleaños de Jordi, que si esto, que si lo otro. Nos pasamos el día para arriba y para abajo y así, no da tiempo para aburrirnos, lo cual, dicho sea de paso, es de agradecer.

Ésta semana se han dejado caer por München una pareja amiga de Jordi y han estado saliendo con nosotros. La verdad es que nos hemos reído y divertido mucho. Creo que mi forma de ser tan exagerada les hacía gracia, jejeje.

El viernes, como siempre, salimos a cenar por ahí, pero el plan de ayer fue mucho mejor. Nos fuimos a un Kloster que estaba donde Cristo perdió el mechero. Un Kloster es un monasterio. Podría decir que los alemanes son los únicos capaces de establecer una relación entre monjes y cerveza, pero la verdad es que estos llevan haciendo cerveza desde la edad media o antes. En muchos monasterios aquí en Alemania hay un Biergarten y elaboran su propia cerveza. No hace falta decir que está siempre buenísima, claro. El caso es que fuimos hasta el Kloster éste que está a unos 100 km de München. La "fiestecita" del viernes por la noche y un vecino taladrando a las 8 de la mañana del sábado sumieron a Carlos en un estado de cansancio más allá de lo que ya es de por sí normal en él por lo que se negaba a conducir y me dejó a mí llevarlo. ¡Que gozada! Mi primera experiencia conductora por las autopistas alemanas, en un BMW Serie 3. La verdad es que eso de correr no es tan peligroso aquí. Teniendo en cuenta que todos están acostombrados y que la velocidad media es de unos 170, ir a 200 como iba yo con el coche no es nada del otro mundo. Solo requiere un poco más de concentración pero se disfruta al máximo. ¡Quiero un BMW para año nuevo!

Y digo para año nuevo, porque como dice el dicho, "año nuevo, vida nueva", aunque en este caso será "año nuevo, contrato nuevo". Sí, las cosas van bien en BMW, parece que estamos convenciendo con lo que estamos desarrollando y van a meter pasta en nuestro proyecto, así que para año nuevo, Carlos me contratará en serio. Todavía no hemos hablado de dinero, tenemos que sentarnos a hacerlo, pero pinta muy bien, por lo que comprarme un coche aquí en Alemania, no será ningún problema ¡Por fin un contrato de verdad, ganando pasta en serio! Estoy muy contento de haber venido a Teutónlandia. Además, vamos a intentar patentar un desarrollo que hemos hecho esta semana. ¡Mi primera patente! A lo mejor no es posible, pero el simple hecho de la oportunidad me agrada un montón. Se supone que eso somos, ¿no? Ingenieros, estamos para inventar, así que lo de patentar no es tan raro, pero no deja de hacerle a uno ilusión, por mucho de que la patente la hagamos a través de BMW y no tengamos muchos derechos ni vayamos a ganar pasta de eso directamente, jejeje.

En el siguiente post cuento el arrebato Bricomania que me ha dado.

miércoles, octubre 11, 2006

Cuadricularse

Dicen que a los ingleses les pone tela una cola. No penséis mal, me refiero a un montón de gente puesta en fila para acceder a algún sitio o a algún servicio. Dicen que siempre les ha gustado hacer colas para todo. No se cuanta carga de verdad tiene esta afirmación, pero aun así no deja de sorprenderme.

De lo que estoy seguro es de que por mucha cola que hagan, nunca la harán tan bien como estos teutones. Muchas veces es asombroso y la mayor parte es de agradecer. Ponerse en cola en este país es un arte, tan solo porque siguen dos premisas basicas:
- La cola no debe molestar a los que no quieren hacerla.
- No saben que significa el termino "colarse".

Uno compara la situacion con cualquier cola ordinaria que encontraría en su tierra natal y se le caen los palos del sombrajo. A los hechos me remito:
- Sabado, 7 y media de la tarde en un carrefour cualquiera. A las 200 millones de familias que aprovechan el fin de semana para hacer las compras semanales o mensuales se unen los 300 millones de cabrones comprando alcohol para el botellón de por la noche. La situación desemboca, necesariamente, en un escenario donde el pasillo de las cajas esta, clara y absolutamente, colapsado por cientos de personas que tratan de pagar sus compras y de huir desesperadamente del Carrefour cuanto antes. Porque seamos sinceros con nosotros mismos... hay que ver lo que apesta el Carrefour! A mí me da siempre fatiguilla. Al final, es imposible circular por el pasillo de las cajas con el carrito sin llevarte por delante a 40 o atascarte sin remedio en una cola donde, curioso, nadie te deja paso. Y si nadie te deja paso es por culpa de nuestro reiterado incumplimiento de la segunda premisa, la de no colarse.

En España, como te descuides se cuela hasta el apuntador en la cola. Hay gente que llega al super, pone el carro en la cola de pagar y se va a dar vueltas por el supermercado para coger las cosas que va acercando al carro, que sigue, pacientemente y en solitario, haciendo la cola por el dueño. ¡Alucinante! También esta el típico/a que te llega con 4 cosas en las manos y te pide colarse porque es rapido. No lo dejes! Nadie te dejo a tí y tu llevas tan solo 4 cosillas, ademas, ¡debería pedirle permiso a ti y a los 40 que hay en la cola detras tuya! (Hay ocasiones en las que hay que ser amable y ceder, obviamente) También esta la versión abuela con cara que se pone en la cola delante tuya hablando con la cajera (viene todos los dias a comprar 2 chorradas asi que conoce la vida y milagros de la cajera) como la que no quiere la cosa y pone sus compras en la cinta transportadora. Como se te ocurra llamarle la atención te dira que estaba antes, que había ido un segundo a coger una cosa... y claro, quien discute con la típica abuela?

Así que no es de tanto extrañar que la gente desconfíe al dejarte pasar por en medio de una cola por si te quedas allí plantado colandote...

Aquí todavía te llama la atención verlos tan ordenaditos, pegados a la pared para no bloquear pasillos, en las escaleras siempre por el lado derecho, sin aglomeraciones...

Creo que echo de menos una buena bulla... Jajajajaja. :-p

martes, octubre 10, 2006

Marea humana

Al final la verdad sale a la luz, jejeje.

No todo funciona en Alemania, o por lo menos no tan bien como a primera vista parece que va a funcionar. Bueno, vale, estoy exagerando. Estos cabrones funcionan bastante bien o cuando menos mejor que en la tierra patria.

En verdad ésto es una pataleta fruto de las dos mañanas que llevo esperando al puñetero U-bahn para ir al curro. No sé porqué extraño motivo, se retrasa. Ésto, que no es el fin del mundo, la verdad sea dicha, provoca una situación bastante curiosa. Digamos que a las 8 y algo el metro de la línea U2, el que pillo yo para ir de mi casa hasta el trabajo, está bastante lleno ya que en esta línea está la parada de BMW. Cuando se retrasa os podéis imaginar lo dificil que es montarse ya que va hasta la bola (calor humano a raudales) pero eso no es lo más divertido. Lo más divertido es cuando para en Am Hart, la parada de BMW. Es entonces cuando una auténtica riada de personas se bajan todos a la vez con una prisa que parece que les han metido un petardo en el culo y enfilan la salida hacia las oficinas. Yo creo que si te quedas parado te arrastran hacia afuera aunque tu no quieras, jejeje. Borreguismo en toda regla.

Tengo un nuevo compi en el curro. En realidad no es ni compi ni nada pues no trabaja conmigo ni en nada de lo que yo estoy haciendo, pero por lo menos hace compañia. Como ya os había comentado antes, trabajo (o más bien trabajaba) sólo en una sala grande (sí, dónde están las puertas del coche). Pues un nuevo diplomante ha llegado a BMW. Es un chaval que está terminando ingeniería y lo han contratado para que haga aquí su proyecto fin de carrera. Le pagan algo de dinero y lo ponen a hacer algo que le interese a BMW. No es un mal negocio.
Como no había hueco para que se pusiera junto a Peter, quien le lleva el proyecto me lo han puesto aquí conmigo. La verdad es que está bien, porque estar solo es un peñazo en muchas ocasiones. Es bastante simpático y es una oportunidad cojonuda para ir practicando mi alemán. Solo tiene una pega. ¡¡¡No sé su nombre!!! Se supone que la semana pasada me lo presentaron pero como los alemanes estos tienen unos nombres superraros, no hay quien se entere. Como no sabía por entonces que me lo iban a poner al lado, no me preocupé mucho por enterarme, pero ahora lo tengo delante y él no para de llamarme Pedro y yo todavía no sé que decirle, porque claro, a éste no puedo decirle pisha o quillo, que no se entera, jejeje. Y a estas alturas da vergüenza preguntar.

domingo, octubre 08, 2006

Fin de semana largo

Es lo que tiene.
No me da tiempo ni a actualizar el blog. Paro menos los fines de semana que entre semana. ¡Y eso que entre semana trabajo! Pero así no nos aburrimos...

El viernes tocó cenita como todas las semanas, aquí es como costumbre nuestra. Esta semana hemos vuelto a ir al Etíope. Otra vez a comer con las manos. Está buenísimo como ya os conté, pero eso sí, no vengáis con una úlcera porque salís de allí con los pies por delante, pica todo pa sus muertos. Menos mal que me encanta el picante.

Yo aprovecho los sábados para vengarme del despertador. Todos los días me lanzo a una lucha encanirzada entre el despertador y yo. Huelga decir que siempre gana él. Más que nada porque para que Carlos me pague a final de mes tengo que ir a trabajar (y trabajar, claro) todos los días. Así que los sábados y los domingos procuro no levantarme muy temprano. Las 12 o 12: 30 me parecen la hora mágica, jajaja. Después de comer decidí pasarme por el IKEA. Sergio me acompañó. Si no vas con el coche, no tengo y tampoco quería pedir otra vez a Jordi que me llevara, el paseito es bastante largo. Hay que pillar un tren hasta un pueblo de las afueras y allí un autobús que llega hasta el IKEA. Una vez allí me compré un armario y una cesta para debajo de la cama, más ropa de cama y unas cestillas de mimbre para poner cosas en la estantería más ordenadas. Sergio se compró una cama entera con colchón y somier y todo eso. Al final conseguimos entendernos para que nos mandaran las cosas esta semana. Por motivos de horario, llegarán el próximo sábado, así que el finde que viene tenemos sesión de bricomanía otra vez. Menos mal que Carlos me ha dejado un atornillador inalámbrico que es la caña y te hace la vida más sencilla.

Al volver a casa nos encontramos con los enganchaos del boxeo. He de decir que mi consola y el juego de boxeo están haciendo estragos, y tengo al Edu superenganchao. En casa estaban Jordi, Lluis y Edu dándose de ostias (con el juego, claro) y habían ido a comprar para preparar una cenilla casera. Así que cenamos en casa y vimos una peli (incomprensiblemente, me quedé sopa).

Hoy hemos ido a casa de Augusto, que nos ha preparado un cocido madrileño que estaba de arte. Buenísimo. Creedme que se agradece comer algo auténtico después de tanta mariconada alemana. El resto de la tarde la hemos pasado en mi casa, pues nos hemos venido a ver la mítica Airbag y desternillarnos de risa.

Tengo que aprovechar los pequeños ratitos que me deja el día para actualizar el blog, pero es que (por suerte) no paro.

jueves, octubre 05, 2006

El poste

Hoy me he apuntado de nuevo a clases de alemán. Lo necesito. Si he venido hasta tierras teutonas ha sido para meterle a mi curriculum un empujón con el alemán y la experiencia laboral en el extranjero. Este idioma es demasiado complicado, pero no hay alemán (que no alemana) que se me resista, jejeje. Hasta el momento he aprendido lo más básico, ha expresar muchas cosas, pero no puedo meterme en una discusión profunda ni nada por el estilo (tampoco es que pueda en español, jajajaja, que mentiroso soy) pero por lo menos puedo ir hasta la academia de alemán y preguntar por los horarios, cuanto cuesta, cuando empiezan las clases, hacer la inscripción e incluso escuchar de parte del director de la escuela que hablo un buen alemán. En cualquier otra circunstancia no dudaría de que me están haciendo la pelota, pero en este caso no sé que pensar, a este tío no le interesa que yo hable un buen alemán... ¡¡¡¡es una academia de alemán!!!!
Bueno, el caso es que está hecho y el lunes empiezo las clases. Todos los lunes y miercoles de 7 a 8 y media de la noche durante 8 semanas. Y solo me ha costado 180 €, que está muy bien de precio, creedme.

Necesito hablar alemán cuanto antes. No podré crecer en ninguna empresa (ni siquiera en la de Carlos) si no hablo alemán. Aquí habla todo el mundo inglés, pero queda muy mal por mi parte venir hasta aquí y no hacer el esfuerzo por hablar el idioma local (y no estoy hablando del bávaro, eso ya lo dejo para los muy cafeteros, jejeje). Así que todos los días vamos a comer e incluso a desayunar con Peter y Daniel, un par de compañeros de trabajo de Carlos. Ahí tiene lugar mi dosis diaria de alemán a bocajarro. Los tres hablan alemán entre si y yo me dedico a afinar el oído e intentar pillar todo lo que puedo, que normalmente no es mucho. Así que digamos que normalmente me entero de lo que están hablando en general, pero ni mucho menos de la conversación. Esto puede parecer una desconsideración por su parte, pero no lo es ni mucho menos. Las veces que me han pedido disculpas por hablar alemán delante mía les he dicho siempre que no hace falta, que es mi culpa y que debo aprender más alemán, así que supongo que han captado que en verdad, por frustante que pueda ser parecer un poste en la conversación, me están haciendo un favor. Y de los gordos.

Entonces es cuando me he dado cuenta de lo importante que es el lenguage corporal, no nos damos cuenta, pero la mitad de la conversación está en las manos y en la cara. Creo que pillo algunas cosas simplemente por la gesticulación y demás. Ya sé que esto es una perogrullada, pero no lo había sentido de manera tan clara hasta que la necesidad ha apretado aquí en Deutschland.

Creo que el resfriado, que sigue su curso molestando y haciéndome moquear como si fuera un grifo abierto, me está afectando al cerebro. Nada más que escribo chorradas, jejeje.

miércoles, octubre 04, 2006

Jesús... ¿te ama? Pos que te regale un portátil por navidad...

"Aquí nave Enterprise llamando a Federación Galáctica. El doctor Spock y el capitán Kirk han tomado rumbo hacía el planeta natal Borg. Solicitamos permiso para establecer contacto."

Esto, que a primera vista parece que me hubiese fumado un trocolo propio del fondo sur en el carranza viene a cuento, no os preocupéis. Tendríais que verme en el trabajo, cada vez tengo más cacharros alrededor. Hoy he incorporado el tercer ordenador a mi puesto de trabajo, de manera que tengo:

- Un portátil corriendo Linux.
- Un portátil corriendo Windows XP.
- Un equipo fijo corriendo Windows 2000.
- Una placa de evaluación corriendo Linux embedded.

Para colmo, la pantalla del portátil de Linux está muriendo y he tenido que conectar un monitor a la salida del mismo para no tener que volver a montarlo todo en otro ordenador. Así que tengo 2 monitores TFT y las pantallas de los dos portátiles, dos ratones y un teclado (tengo que agenciarme otro ratón para el último portátil). estoy rodeado de ordenadores a izquierda y derecha, mi sueño hecho realidad. En verdad es un coñazo aclararse. Pero cuando uno trabaja en cosas de red y tiene que hacer pruebas, hacen falta equipos... La verdad es que da miedo ver el tinglado que tengo montado en la oficina. Tardo más en encender y apagar tanto cacharro que en bajar al sótano por un café...

Hoy he estado por el centro para comprarme unas cortinas. Sí, ya sé, vaya mariconada, pero cuando te da la luz (que no el sol, de ese ya no queda en baviera) tempranito se caga uno en "to" lo que se menea y le apetece buscar unas cortinas así como coquetas, oye... Al final no he comprado unas porque pensé que serían pequeñas. La falta de experiencia en estas lides me ha hecho tirarme a la calle sin la previa precaución de haber medido la ventana. Gilipollas que es uno... Al final tendría que haberlas comprado. Mañana me paso en un salto y las pillo, que me hacen falta.

Estando en el centro he visto dos cosas que me han llamado la atención poderosamente.
La primera es ver un montón de adornos de navidad y cosas de navidad en general en una tienda. ¡¡¡¡¡¡¡QUÉ ESTAMOS EN OCTUBRE!!!!!!! Yo no sé a vosotros, a mí la navidad me da fatiga. Se supone que navidad es del 25 de diciembre al 6 de enero, pero es que esto es ya un puñetero coñazo. Empiezan a dar por saco con la navidad en (normalmente, ahora veo que antes) noviembre y cuando llega la navidad estás hasta las pelotas de Papá Noel, los renos, los camellos, los reyes magos y el turrón de chocolate. ¡Si cuando llega la navidad estás tan harto de comer peladillas, hojaldrinas, mazapanes y polvorones que se quedan muertos de asco en el típico plato de dulces navideños que no se come nadie! Por que esa es otra ¿quién se come los dulces del plato? He de decir que yo, que soy un tragaldabas, ni lo toco, así que no puedo encontrar explicación alguna a la desaparición de los mismos. Con el paso de los años he elaborado una teoría al respecto: se desintegran. Por lo menos eso pasa con los turrones. Por que decidme, ¿quién carajos come el turrón del duro? El turron del duro es una cosa hecha con almendras y una especie de cosa blanca al rededor que al cabo de un par de horas de estar en el plato se convierte en el fondo del mismo, impregnando de semejante sustancia al resto de polvorones y trozos de turrón del blando y de chocolate y dejando una extraña formación de almendras recluidas en una especie de sandwich de galleta de oblea de misa... Y luego no hay quien se coma el turrón, pero claro, viendo la mala cara que se le pone al turrón del blando al ratito de cortarlo, que suda más que una foca en el desierto, ¿a quién le apetece hincarle el diente? Entiendo que los bombones desaparezcan rápido del plato, pero seamos sinceros, ¿cuántos años hace que no pruebas una hojaldrina? Esa masa reseca y polvorienta no se la come nadie. Yo la última que probé se bebió mi café, me cabree y decidí no comer ninguna más. De eso hace años.... A mí no hay cosa que me engollipe más que un polvorón, así que normalmente ni los pruebo. Con todo esto, no entiendo como desaparecen los dulces navideños del plato, pero es un hecho.
Pero bueno, el hecho de que empieces a comer dulces de navidad en noviembre no es el único que hace que la navidad se me atragante, podemos sumar la cantidad de películas bódrio donde el amor navideño nos inunda (a mediados de noviembre), las canciones taladro-navideñas (para cuando un villancico nuevo, por favor), las reposiciones de Rey de Reyes, el mensaje del Rey, los "papá noel" verdes de amena que este año amenazan naranjas, y un sin fin de chorradas que hacen que el día 24 a medio día, estés deseando que se acabe la navidad.
Creía que lo había visto todo en "noveleríos", pero no, ya están dando por culo con la navidad aquí en Munich (bueno, de momento solo una tienda).

Los que sí que están dando la nota son unos cuantos atrapados que ya ví el otro día y que pensaba que estaban de manifa o algo así, pero que hoy he vuelto a ver, por lo que deben de ser activistas o algo por el estilo. Son un montón de personas apostadas en el centro con pancartas grandes de "Jesús te ama", "Jesús vive", "Jesús está contigo" (pero en alemán, claro), que espero que no estén apoyando al tontolabas aquel que pretendía ser Bustamente del último Operación Truño... No, fuera de bromas, ya es la segunda vez que los veo por el centro y con el frío que hacía hoy, ya son ganas de dar la brasa en la calle. Pero allí estaban ellos, intentandonos convencer de que Cristo Vive. ¡Pero sí ya lo dijo el Vera Luque en su chirigota! (para los muy cafeteros). Bueno, no voy a ser irrespetuoso que esto lo lee mi madre y se mosquea cada vez que doy pruebas de mi ateísmo recalcitrante.
Solo una pregunta que lanzo al aire: Si cristo vive, no vivirá en Africa, ¿no? Con la misería que hay allí se moría de nuevo en menos de lo que canta un gallo. Ni en Africa ni en el Líbano, ni en Corea del Norte, ni Tailandia, ni... Que me lo expliquen y luego me lo creo. O mejor, que se lo expliquen a ellos.

Y pa colmo estoy resfriado... ¡Qué vida más perra! (Me quejo de vicio y de cachondeo, que conste)