A "Sien" por hora...

Como auténticos profesionales estos hijos de Schumacher

Joder, voy a cien por hora.

No tengo tiempo ni para mirar el reloj y siendo sinceros, no diré que es porque no paro de trabajar, jejeje. Aunque mis 8 horas diarias no me las quita ni dios...
El "problema", si es que se puede llamar así, claro, es que estos cabrones no paran de hacer cosas todos los días y los fines de semana descanso menos que los días de diario. Que conste que esto no es un queja, jejeje, me mantengo entretenido, pero también se va el dinero que es un gusto. A ver si me relajo y me lo tomo con más calma. La cuestión es que estamos intentando aprevechar los últimos días decentes antes de que llegue el invierno puñetero muniqués.

El viernes fuimos a cenar a un italiano por aquí cerca y como estaba reventado no me apunté a la copa de después y me fui a dormir.
El sábado nos pegamos todo el día fuera. Intentamos comer en la Oktober pero estaba imposible entrar en ningún lado, así que nos fuimos a un restaurante cerca de la Oktober. Probé un plato típico bávaro, el pato. Me comí medio pato asado. La verdad es que estaba riquísimo (no hay fotos, sorry) y nos tomamos un par de masses de helles que sentaron bastante bien. Después nos fuimos a la Oktober sin demasiadas esperanzas de entrar en ninguna tienda, pero la suerte y el palique de gonzalo, todo sea dicho, nos consiguieron camelar a una de las camareras que salió para que nos colara.
La Oktober funciona de la siguiente manera: si la tienda está petada se cierran las puertas (hay un montón por todos los lados) y los seguratas vigilan que no entre nadie. Entonces te toca hacer cola e intentar camelarte a un portero para que te deje pasar. Luego está la segunda opción, que consiste en interceptar a una camarera que esté buscando gente fuera para llenar alguna mesa que tenga vacía. Como cada una tiene asignadas sus mesas necesitan que estén llenas para hacer dinero (ganan a comisión de lo que vendan). Tuvimos suerte y una camarera nos pudo colar, así que no esperamos apenas nada. Una vez dentro, lo que ya os he contado otras veces. Birras (muchas) y mucho baile, mucho calor y mucho sudar. La verdad es que te lo pasas del carajo, pero yo me borro ya de la Oktober... Acaba oficialmente el martes pero yo ya no la piso más, que estoy hasta las pelotas de la Oktober. Cada vez que vas son 50 euros mínimos entre pitos y flautas (y masses, claro).
Yo no me quedé hasta que cerraron. Preferí venirme antes que ya estaba bastante cansado y necesitaba hablar con Macamen para concretar las fechas de su regreso a Alemania. Se viene un par de semanas en Noviembre y ya mismo ayer le compré el billete. De puta madre...
Hoy domingo nos hemos levantado bastante reventados por la paliza de ayer. Se han colado en casa hasta el apuntador y hemos estado picando aquí. La idea era ir a comer fuera, pero nos hemos líado a picotear las chacinas y el queso que nos quedaban por aquí a Edu y a mí y cuando hemos terminado, yo y el resto ya estabamos comidos...

Después nos hemos ido Carlos, Jordi y yo a unos Karts cerca de München a dar vueltas como cabrones. ¡Vaya profesionalidad! Ahora entiendo lo del Schumacher de los huevos. Había un montón de peña con su kart propio allí, en plan motor ajustando y corriendo como demonios, con el mono y todo. Lo mejor eran unos crios superpequeños corriendo como cabrones con los karts... Hemos echado media hora corriendo como locos. A la media hora tenía ya el café dándome peligrosas vueltas en el estómago, jejeje. A mitad de carrera me han parado para llamarme la atención porque se creían que estaba picado con Carlos, jajaja. En la entrada a una chicane he intentado frenar tarde y colarme por el interior y me lo he llevado por delante al cerrarse el para tomar la curva. Lo bueno de los karts es que por muy cafre que seas no pasa nada porque van protegidos con el plastico exterior y parecen coches de choque. Pero bueno. No ha pasado a mayores y hemos seguido corriendo hasta cansarnos a muerte. Media hora es mucha tela en los karts.

Ahora estamos en casa jugando al juego de boxeo de mi xbox (sí, me la traje) y están todos flipados dándose de ostias a muerte. Ya lo advertí que traía el juego más adictivo de la historia...

Mañana no curran muchos aquí porque el martes es fiesta y hacen muchos puente gastando los días que tienen de vacances. Yo no iré a BMW pero curraré desde casa, porque todavía debo unas pocas de horas que tengo que hacer. Cada vez que tengo que ir al aeropuerto pierdo 4. Duespués estos cabrones quieren hacer una LAN party en casa. Ya veremos que pasa.